Coalición por Melilla (CPM) afirmó ayer que la ciudad tiene “el futuro complicado” con el Gobierno del PP, presidido por Juan José Imbroda desde hace 17 años, al que acusó de no resolver los problemas e incluso agravarlos. El portavoz de CPM, Hassan Mohatar, valoró así el mensaje de Navidad que Imbroda dirigió a los melillenses en Nochebuena a través de la televisión pública, en el que el presidente de la Ciudad Autónoma dijo que esta ciudad tiene futuro y pidió a los ciudadanos que hagan “piña” para lograr una ciudad mejor para todos. “Todos queremos que esta ciudad tenga futuro, pero con el Gobierno que tenemos ahora, el futuro es complicado”, aseveró Mohatar, en cuya opinión Melilla “necesita un cambio de aires y de rumbo”, ya que Imbroda lleva 17 años como presidente y en este tiempo “los problemas siguen igual o se han acrecentado”.
“Lo que necesita esta ciudad es un cambio”, continuó el portavoz cepemista antes de señalar que en las elecciones autonómicas de 2015, el electorado ya lanzó ese mensaje al PP quitándole la mayoría absoluta que llevaba disfrutando desde 2003, si bien el pacto con el extinto PPL ha provocado una vuelta a “la misma política de rodillo”.
Mohatar cree que una prueba de ello es lo que ocurrió el pasado 22 de diciembre, cuando la Asamblea aprobó los Presupuestos Generales de la Ciudad Autónoma de 2018 (PGCAM) con los únicos votos a favor de PP y Grupo Mixto, mientras los tres grupos de la oposición votaron en contra.
Presupuestos 2018
En este punto, el portavoz de CPM opinó que a los miembros del Gobierno local “se les debería caer la cara de vergüenza cuando dicen que estos son los Presupuestos que necesitan los melillenses y que siguen el progreso social”. “Nada más lejos de la realidad”, agregó Mohatar para señalar que las inversiones han descendido respecto al año pasado, a pesar de que este capítulo es el que denota “el compromiso con la generación de empleo”.
También apuntó que en políticas sociales “sigue siendo el mismo presupuesto de años anteriores”, aunque habrá familias melillenses que no puedan acceder a las ayudas después de que se hayan endurecido los requisitos. En este punto, CPM indicó que podrían estar de acuerdo en que se eleve a cinco años la exigencia de tiempo de empadronamiento en Melilla, pero no a las familias que son naturales de Melilla.
Por último, insistió en los argumentos que ya ofreció CPM en el Pleno del pasado viernes respecto a que hay demasiado personal eventual, cuyos puestos se podrían cubrir por oposiciones o bolsa de empleo, y las subvenciones que reciben “asociaciones afines al Gobierno”.
