El cuadro cajista fue muy superior, de principio a fin, al conjunto melillense. Y eso que los almerienses jugaron a medio gas ante un rival que tuvo bastantes problemas en la recepción, sufriendo bastante con el saque de su rival. Javier Monfort fue el jugador más destacado del encuentro, siendo decisivo en el saque y en el ataque, además de mostrarse muy motivado ante su ex equipo y de estar bien acompañado en labores ofensivas por el opuesto Thiago Maciel. El Club Voleibol Melilla cayó ayer sábado por la vía rápida ante el Unicaja Almería por 0-3 (14-25, 16-25 y 16-25), en el primer partido del nuevo año 2018 ante su público, en el Pabellón de Deportes Javier Imbroda Ortiz, tras una hora y seis minutos de juego. El cuadro cajista fue muy superior, de principio a fin, al conjunto melillense. Y eso que los almerienses jugaron a medio gas ante un rival que tuvo bastantes problemas en la recepción, sufriendo bastante con el saque de su rival.
Javier Monfort fue el jugador más destacado del encuentro, siendo decisivo en el saque y en el ataque, además de mostrarse muy motivado ante su ex equipo y de estar bien acompañado en labores ofensivas por el opuesto Thiago Maciel.
El duelo comenzó con gran igualdad en los primeros compases, pero, tras el 6-6, el cuadro andaluz consiguió un parcial de 0-5, con dos aces consecutivos incluidos, con el que marcó las diferencias para marcharse al tiempo técnico con ventaja de 10-12, y tras su regreso a la pista impuso su potencial en todas las facetas del juego para incrementar su ventaja hasta el definitivo 14-25.
Los visitantes mantuvieron su nivel en la siguiente manga, en la que de nuevo Javi Monfort seguía mostrándose contundente desde los nueve metros, en el bloqueo y en el ataque. Los visitantes adquirieron pronto una ventaja de dos puntos (5-7) para ampliarla al tiempo técnico en 7-12. Los melillenses seguían fallando en la recepción y lo pagaron caro ante un rival que no tuvo problemas para cerrar el parcial (16-25).
El Club Voleibol Melilla intentó engancharse al partido, pero afrontó el tercer y último set con desventaja por la lesión de su colocador Vicente Monfort. Al menos, el equipo le echó casta, pero no fue suficiente ante un rival del potencial del Unicaja Almería, que no tuvo que forzar la ‘máquina’ para marcar las diferencias desde el inicio, aunque fue la manga más competida, ya que los locales acortaron las distancias en 11-12, después de irse al tiempo técnico con un adverso 9-12. Sin embargo, Javi Monfort y Thiago Marcial seguían mostrando un gran nivel para disparar de nuevo al conjunto almeriense en el electrónico y finiquitar la contienda (16-25).
