La plantilla de la U.D. Melilla reanudó ayer lunes el trabajo de la pretemporada, tras el descanso del pasado fin de semana. Para este primer entrenamiento, el entrenador Víctor Cea planificó una doble sesión, con un arranque duro de semana, en el Estadio Municipal Álvarez Claro. Lo primero que hizo el plantel azulino fue trabajar la fuerza específica, a las órdenes del preparador Carlos Gómez. Los jugadores cumplieron con el trabajo, a pesar de la exigencia y del calor.
Posteriormente, el plantel trabajó con el balón, pero sin bajar el listón de intensidad, con situaciones de juego en espacios reducidos, optimizar la salida del balón y perfilar la presión alta.
El meta Cristian Parra saltó un poco más tarde al césped para ultimar su preparación con el fisioterapeuta Alejandro Ríos, aunque luego ha sido uno más en el trabajo.
Sesión vespertina
Ya por la tarde, la plantilla regresó de nuevo al trabajo en el césped, aunque con menor carga física, pero no en cuanto a la concentración y la presión. El preparador madrileño del Melilla diseñó un trabajo contextualizado y de juego posicional en espacios amplios.
