Por cuarto año consecutivo, y ante la prohibición de pasar borregos desde Melilla a Marruecos a pesar del cambio de gobierno tanto en el ejecutivo central con la entrada del PSOE en lugar del PP y en el autonómico otro tanto de lo mismo con el tripartito CPM, PSOE y Ciudadanos en sustitución de los populares, cientos de melillenses optarán por pasar la pascua grande del Aid en el Kebir en el país vecino ante su preferencia por los corderos marroquíes frente a los peninsulares.
Ello provocó que anoche, viernes, se produjera un auténtico éxodo de melillenses hacia el país, el primero que hay previsto durante todo este fin de semana, para durante la mañana del lunes protagonizar el sacrificio del cordero marroquí en casas propias, de familiares, de amigos o incluso de quienes se decantan por alquilar casas únicamente unos días para pasar la fiesta.
Esta salida masiva, unida a la Operación Paso del Estrecho, provocó anoche un verdadero tapón en los distintos puestos fronterizos que separan Melilla de Marruecos, de forma especial el de Beni-Enzar, donde las colas se mantuvieron hasta altas horas de la madrugada hasta más allá del puesto fronterizo de Barrio Chino.
Las pitadas de protesta por la lentitud con la que se movía la cola fueron constantes, con el consiguiente perjuicio para vecinos de la calle General Astilleros, barrio del Real y Caracolas, que además del ruido, tuvieron verdaderos problemas para poder acceder con sus vehículos a sus domicilios. No fueron pocas las denuncias en este sentido, ante el colapso que sufrieron varias vías por tanta aglomeración de automóviles y sobre todo por la lentitud en el paso desde nuestra ciudad al reino alauí.
