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De Castro pide responsabilidad y “mesura” a todos tras la sentencia

Los dos grupos de la oposición en la Asamblea de Melilla

El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Eduardo de Castro, pidió ayer “mesura” y “responsabilidad política e institucional” a todos los partidos políticos con representación en la Asamblea después de la sentencia del Tribunal Supremo por la que ayer tuvieron que ser cesados los seis miembros no electos del Gobierno local. A preguntas de los periodistas, De Castro explicó que había transmitido esta petición durante la celebración de una Junta de Portavoces, en la que se explicó la situación tras esta sentencia, que “marca un antes y un después” en la Ciudad Autónoma, habida cuenta que “pone en cuestión el sistema autonómico de Melilla”.
El presidente melillense argumentó que la sentencia no aplica la legislación autonómica, sino la Ley de bases de Régimen Local, “que es la propia de los ayuntamientos”, si bien “Melilla es algo más que un ayuntamiento, como reconoce la sentencia”.
“Habrá que tomar una decisión y decir claramente qué queremos hacer con esta ciudad, si queremos ser un ayuntamiento, si, como dice alguno, nos integremos en la Junta de Andalucía, o si, como digo yo, intentemos ser una comunidad autónoma, con sus ventajas e inconvenientes”, defendió De Castro.
En su opinión, Melilla no puede continuar siendo ayuntamiento para unas cosas y comunidad autónoma para otras, porque eso da lugar a problemas, como ha sucedido ahora.
Asimismo, indicó que, durante la Junta de Portavoces, el portavoz del Grupo Popular, Miguel Marín, defendió que la sentencia del TS había que aplicarla inmediatamente, algo que De Castro rebatió porque, “aunque sepa más de Derecho que yo, porque se graduó hace unos días, hay juristas en esta ciudad a los que hay que recurrir porque son elementos consultivos y él no lo es”.
En este punto, negó que la aplicación de la sentencia sea cuestión de “llegar y darle a un botón”, sino de “hacer las cosas con la mesura y prudencia debida”, al tiempo que puntualizó que el fallo judicial no es de aplicación directa a Melilla, porque es relativo a un caso de Ceuta, “pero sí indirecta”.
“Hay una cosa que se llama casación y cualquier ciudadano puede usarla para echar para atrás cualquier acto administrativo que tome cualquier consejero”, agregó De Castro, insistiendo en su idea al afirmar que si la sentencia hubiera llegado hace 7 meses, “este problema lo habría tenido el PP”.
En cualquier caso, desmintió que la actividad administrativa en la Ciudad Autónoma se haya paralizado tras hacerse pública la sentencia del Tribunal Supremo por la que han tenido que ser cesados los seis miembros no electos del Gobierno local, ya que explicó que todos los consejeros de su Gobierno han estado trabajando hasta el miércoles y “la suplencia de firmas está funcionando”.
“Todo está controlado”, afirmó De Castro haciendo una llamada de tranquilidad afirmando que “es mentira que haya más problemas que antes, excepto este, que es un gran problema”, al tiempo que acusó de irresponsables a quienes “usan una sentencia y las decisiones del poder judicial para hacer política”, todo con el objetivo de “intentar confundir a la gente”.
A su juicio, es “una mala praxis y una falta de respeto institucional al poder judicial y al autonómico”.

Reestructuración
Por otro lado, sobre la reestructuración del Gobierno local, explicó que ya ha tenido conversaciones con los responsables de CPM y PSOE, Mustafa Aberchán y Gloria Rojas, con el objeto de “hacer lo antes posible”, pero insistió en que hay que buscar el consenso y tener en cuenta “la correlación de fuerza y proporcionalidades”.
“Si dependiera del presidente, que es el que tiene la facultad de nombrar y de cesar, ya estaría hecho, pero sería un Gobierno con un presidente absolutista que toma decisiones sin contar con nadie”, afirmó De Castro tras avanzar que van a intentar mantener “más o menos igual” la estructura del Ejecutivo, lo que requiere “volver a negociar”.

Presupuestos
Por último, respecto a los Presupuestos Generales de la Ciudad Autónoma de 2020, indicó que estaba cerrado, pero le ha afectado por el cese del consejero de Hacienda, por lo que ahora deberá hacerse cargo de él la persona que le vaya a relevar en dicha responsabilidad, si bien aseguró que el Gobierno “está en tiempo”.

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Redacción

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