Medio centenar de estudiantes de Segundo de Bachillerato de los distintos centros de la ciudad acudieron ayer a la segunda edición de la fase local de la Olimpiada de Química que organiza la Asociación Melillense de Enseñanza para la Divulgación de la Física y la Química, que la integran profesores de estas ramas docentes. Según explicó a este Diario Lucía Ruiz, secretaria de la Asociación Melillense de Enseñanza para la Divulgación de la Física y la Química, desde hace dos años vienen organizando en la ciudad las olimpiadas de Física y la de Química con las que buscan despertar inquietudes científicas en los estudiantes melillenses.
Aquel alumno que se clasifique en la fase local, acudirá a la nacional que se celebrará en la Universidad de Valencia entre el 24 y el 26 de abril. “Lo que buscamos organizando estas olimpiadas es despertar inquietudes científicas en los estudiantes, en especial en el que acuda a la fase nacional que podrá impregnarse del espíritu científico de otras ciudades”, dijo. También que tengan un acercamiento a la investigación científica.
Participar en la fase nacional supone todo un revulsivo, porque el alumno tiene ocasión de compartir experiencias con estudiantes de todo el país, en eventos que cuentan con el apoyo de las Reales Sociedades de Física y Química de todo el país y de la participación de profesores llegados desde todos los rincones de España. “Queremos que se contagie de todo aquello que sin duda le abrirá muchas puertas”, apuntó la profesora.
Como en la de Física, la Olimpiada de Química incluyó un examen tipo test de contenidos de 1º y 2º de Bachillerato en la materia, en el que se pretende que el estudiante “demuestre los contenidos de la asignatura, pero no buscamos una prueba complicada, sino que muestren las destrezas adquiridas en esta etapa educativa, pero las dos o tres últimas preguntas sí pueden ser de un mayor nivel”, dijo.
Afirma Lucía Ruiz, que el nivel de los alumnos de Bachillerato de Melilla es alto: “tenemos un buen alumnado y así lo demuestran en las notas de ciencias, y son alumnos que siempre quieren mejorar sus calificaciones, tienen afán de superación”.
Educación
El director provincial de Educación, Juan Ángel Berbel, aseguró que una olimpiada científica “siempre es un motivo de orgullo, porque los alumnos que acuden lo hacen en horario extraescolar y es una buena vara de medir sus conocimientos con respecto a otros estudiantes de la ciudad”.
Dijo que acuden aquellos estudiantes que “destacan en química, que suelen ser buenos estudiantes, y que pueden llegar a ser futuros médicos, bioquímicos o profesionales de la rama sanitaria”.
