La delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, aseveró ayer que dos sentencias contradicen la postura de las Naciones Unidas, cuyo Comité de los Derechos del Niño ha instado a España a que escolarice a una niña en el sistema educativo para “prevenir daños irreparables” en esta menor de edad. A preguntas de los periodistas, Moh recordó que, en este caso concreto, una sentencia avala la actuación del Ejecutivo y le insta a no escolarizar a la menor “como medida cautelar”, habida cuenta que tanto la niña como su madre “no argumentaban o no eran capaces de acreditar su residencia legal en Melilla”.
“Después de este auto, también tenemos una sentencia avalando lo mismo, la no escolarización, debido a que no hay ningún problema es que se escolarice a esta niña, pero en su país de origen, que en este caso es Marruecos”, defendió Moh.
La delegada del Gobierno destacó el “trabajo exhaustivo y riguroso” que está llevando a cabo la Dirección Provincial del Ministerio de Educación en Melilla, organismo que está comprobando “caso por caso” cada solicitud de escolarización que le llega.
Sabrina Moh subrayó las diferencias entre Melilla y otros puntos del territorio nacional debido a su condición fronteriza con Marruecos, lo que, unido al Acuerdo de Buena Vecindad que se aplica, la ciudad recibe a un gran número de personas del reino alauita que entran y salen sin vivir en ella.
Acreditar que estas personas residen de forma efectiva en Melilla da lugar a una situación “más complicada” que en otros lugares de España, donde “no hay dudas” de que los marroquíes viven allí.
Moh afirmó que por este asunto se “ha atacado mucho” al Gobierno, pero insistió en que “se está haciendo un trabajo exhaustivo comprobando caso por caso y acorde a la legalidad en todos los casos”.
