El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, ha revelado que el sector sanitario es el más golpeado en nuestra ciudad por la crisis del coronavirus. Son en total 27 empleados de la Sanidad en Melilla los afectados por el Covid-19, seguido muy lejos por la Policía Nacional con cuatro miembros, tres de la Policía Local, 2/3 de la Guardia Civil y 2 del Centro Penitenciario, según los datos avanzados ayer por la primera autoridad. El diputado de la “formación naranja”, en su comparecencia telemática, también puso de relieve que su participación en la cuarta conferencia de presidentes autonómicos desde la vigencia del estado de alarma, trasmitió al presidente del Gobierno Pedro Sánchez la necesidad de que los materiales sanitarios que han solicitado lleguen cuanto antes.
Eduardo de Castro recordó que Melilla cuenta con seis camas de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) que se han ampliado a siete, insuficientes para afrontar una pandemia, motivo por el que ha dado las gracias tanto a Sánchez como a la ministra de Defensa presente en la reunión, Margarita Robles, por el envío a Melilla del barco hospital “Galicia”, que cuenta con 8 UCI y un helicóptero medicalizado, por si hubiera que hacer un traslado urgente de algún enfermo a la península.
La autoridad melillense señaló igualmente la necesidad de disponer de más respiradores y admitió que los que ha solicitado el Instituto de Gestión Sanitaria (Ingesa) tardarán varias semanas en llegar, motivo por el que desveló que está buscando otras alternativas para lograr este material lo antes posible. Por un lado, citó sus gestiones con una empresa catalana y por otro con un presidente de comunidad autónoma, en este último caso para logar respiradores que está fabricando la empresa de automóviles SEAT.
De Castro ha indicado igualmente que hasta el momento se han realizado 446 PCR (las siglas en inglés de reacción en cadena de la polimerasa) en Melilla, algo que considera “insuficiente”.
También ha recordado que la Ciudad Autónoma ha comprado 10.000 test rápidos, un material que espera que llegue esta semana. Eduardo de Castro negó que interfiera en la adquisición de los test que había planteado el consejero de Salud Pública, Mohamed Mohand (PSOE), por temas económicos al ser más caros los del socialista, sino porque esos nunca llegaron, motivo por el que criticó a Miguel Marín por hacer este tipo de manifestaciones.
Por último, volvió a aclarar que cuando tachó a Melilla como “una ratonera”, se refería al hecho de que la ciudad tiene cerradas todas sus vías de conexión con el exterior y por las complicaciones que presenta actualmente el hecho del salir de la ciudad por las restricciones impuestas durante el estado de alarma.
