Por segundo año consecutivo el número de agresiones al personal sanitario en Melilla han disminuido, pasando de las 19 de 2015 a las 7 que se produjeron en 2017 según se expuso en la reunión que mantuvo ayer el equipo directivo del Instituto de Gestión Sanitaria (Ingesa) junto a la subdirectora general de Atención Sanitaria, Elisa Perlado, en el análisis de la posible actualización del "Plan de Prevención y atención frente a situaciones conflictivas en el Área de Salud de Melilla", que INGESA tiene vigente desde octubre de 2005. Este análisis se efectuó aprovechando la reunión de la comisión de seguimiento del Centro de Salud de la Zona Este para su próxima reapertura tras las obras que se han efectuado de rehabilitación y modernización.
Encuentro
En el transcurso de la reunión se estudió la situación actual del Área Sanitaria en relación a las agresiones sufridas por el personal. Al respecto el director territorial, Francisco Robles, manifestó que INGESA asume las reivindicaciones del personal y de los representantes sindicales al respecto. No obstante apunta que desde hace años el INGESA tiene especial dedicación a salvaguardar el desarrollo del trabajo de sus profesionales. En este sentido recordó que se han realizado numerosas actuaciones para impedir que se den estas situaciones en los centros sanitarios.
Entre ellas, además de la reciente implantación en la ciudad del desarrollo de la Instrucción 3/2017 de la de la Secretaría de Estado de Seguridad del Estado sobre medidas policiales a adoptar frente a agresiones a profesionales de la salud, están el refuerzo de la presencia de vigilancia privada, la instalación de botones antipánicos, plan formativo del personal, cambio de apertura de los centros los sábado y concienciación de los usuarios. Asimismo, también está la personación de INGESA en los casos judiciales abiertos para solicitar que se considere que toda agresión significa un atentado, lo que supone un aumento en las penas y actúe como medida disuasoria.
Con respecto a los datos de agresiones de 2017, que han sido siete, Robles manifestó que, a pesar de que han disminuido en los dos últimos ejercicios (en 2015 fueron 19 y en 2016 se produjeron 11), no se puede estar satisfecho mientras que "se produzca una sola agresión" y anunció que se va a proceder a un análisis detallado de todos los recursos técnicos, del personal de vigilancia y de la formación para el manejo de las situaciones conflictivas. Como novedad más notable se ha tratado el nuevo plan frente a las agresiones al personal de INGESA que la subdirectora general de Atención Sanitaria ha ultimado y que, en fechas próximas, se llevará a la Mesa Sectorial.
Centro de Salud de Polavieja
En el transcurso de la reunión de seguimiento para la puesta en funcionamiento del Centro de Salud de la Zona Este (Polavieja) se ha comprobado el estado de las instalaciones antes de entrar en servicio en los próximos días. En concreto el equipo directivo y la subdirectora han visitado las diferentes plantas del inmueble y se ha comprobado que todo el equipamiento está ya en el centro, así como la señalización se está instalando en estos días y que funcionan a pleno rendimiento los equipos informáticos.
También se ha repasado la situación administrativa del centro tras las obras de rehabilitación. En este sentido, tal y como se anunció en nota de prensa del pasado 18 de diciembre, ya se dispone de la licencia de primera ocupación y se está a la espera de que culminen los siguientes trámites preceptivos de índole administrativa, y que competen a la Ciudad Autónoma de Melilla.
