Un ciudadano marroquí ha sido condenado a un total de 6 meses de prisión tras ser interceptado en compañía de su mujer -con respecto a quien tenía vigente una orden de alejamiento- y su hija cuando se disponía a embarcar en el buque de Trasmediterránea con destino Almería. El hombre fue detenido por la Policía Nacional, si bien en todo momento manifestó no entender por qué no podía estar con su mujer. El Ministerio Fiscal interesaba inicialmente para el acusado la imposición de una pena de 9 meses de prisión, si bien la adhesión de la defensa y el hecho de que el quebrantamiento no fuera grave suscitó una rebaja de 3 meses. El 18 de agosto de 2016, un matrimonio marroquí -en compañía de su hija- se disponía a embarcar por el acceso peatonal en el buque de Trasmediterránea con rumbo Almería cuando, al llegar la mujer al control de pasaportes de la Policía Nacional, el agente encargado del control se percató de que sobre el hombre pesaba una orden de alejamiento con respecto de su mujer, impuesta el 25 de julio de aquél mismo año.
El agente comunicó al hombre que estaba incurriendo en un delito de quebrantamiento de condena, y procedió a su detención. Según declaró el agente interviniente, durante la citada detención, el acusado se mostró perplejo y manifestó en todo momento no entender por qué no podía estar junto a su mujer. Los billetes de barco eran correlativos (se sacaron juntos).
El Ministerio Fiscal interesaba para el acusado (quien carecía de antecedentes en el momento de los hechos) la imposición de una pena de 1 año de prisión, si bien la adhesión de la defensa del acusado, que no se personó en la vista, a las manifestaciones del Ministerio Fiscal suscitaron una considerable rebaja de pena, que finalmente quedó en tan solo 6 meses de prisión por la comisión de un delito de quebrantamiento de condena. El Ministerio Público no se opuso a la suspensión de la condena, extremo que se resolverá en la sentencia.
