La Guardia Civil ha detenido en Melilla a un marroquí de 28 años acusado de vender "pegamento y droga" a menores extranjeros no acompañados (MENA), entre otros, en una chabola construida junto a una cueva de difícil acceso ubicada en la Cuesta de La Alcazaba. Según ha informado este domingo un portavoz de la Comandancia, en la tarde de este sábado un inmigrante residente en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla se personó en las inmediaciones de la Comandancia, advirtiendo que en la zona de la playa de Horcas Coloradas había menores "esnifando pegamento y consumiendo droga" que les proporcionaba un joven a cambio de dinero. Tras esto, diversas patrullas se desplazaron al lugar donde se realizó cerco policial hasta la llegada a una chabola construida junto a una cueva ubicada cerca del mar, "en pendiente, zona abrupta y de difícil acceso". En su interior había dos personas, una mayor de edad y otra menor, que se vieron sorprendidos y sin capacidad de reacción ante la presencia de los guardias civiles.
El portavoz ha explicado que en el cacheo superficial de ambos localizaron en el mayor de edad de "doce tubos de pegamento y una dosis de hachís", dinero en efectivo, así como un resguardo de envío de dinero mediante transferencia a Francia.
La situación conllevó a la detención de la persona a la que se localizó la droga e inhalantes junto a los otros enseres descritos, como supuesto autor de un delito contra la salud pública, venta de droga in fraganti, con el agravante de realizarlo a un menor de edad y en zona peligrosa, dado que la deambulación por ese lugar tras su consumo, pudiera conllevar a un accidente de consecuencias imprevisibles.
Contra la salud pública
La citada fuente ha precisado que la Guardia Civil ya contaba con noticias de la venta a jóvenes y menores de edad de drogas e "inhalantes" como el pegamento, que contiene sustancias volátiles con propiedades psicoactivas que alteran la capacidad sensorial de las personas que lo consumen, hecho constatado tras la localización de estas personas y su traslado a los Centros Sociales para velar por su seguridad y puesta a disposición de los Servicios Sociales.
El detenido es un joven de nacionalidad marroquí de 28 años de edad que se encuentra en situación de libertad provisional por un delito de daños en vehículos, el cual pasará este lunes 18 de febrero a disposición judicial como supuesto autor de un delito contra la salud pública a menores de edad en situación de vulnerabilidad.
El menor localizado junto al detenido, también de nacionalidad marroquí, es residente en el CETI de Melilla, lugar al que se trasladó en aplicación de la legalidad vigente.
