El Melilla Baloncesto se medirá hoy juevess (21’00 horas) al Carramimbre Valladolid, en encuentro correspondiente al tercer partido de los cuartos de final del Play Off de ascenso a la Liga Endesa, que se disputará en el Polideportivo Pisuerga. El choque podrá seguirse en directo a través de la LaLigaTV y por Televisión Melilla, y contará con el arbitraje del trío formado por Sánchez Barazon (VAS), Lizana Moreno (AND) y Albacete Chamón (CLM). El decano afronta este jueves (21’00h, LaLigaTV y TVM) el tercer partido de la serie de cuartos de final que está disputando ante el Carramimbre Valladolid y que ahora se traslada a tierras pucelanas con el factor cancha recuperado por parte vallisoletana, tras el 1-1 con el que terminaron los dos encuentros disputados en el Pabellón Javier Imbroda.
Si algo está dejando claro esta temporada la LEB ORO es la igualdad reinante entre todos los equipos, algo que demuestra que todos los equipos que tenían el factor cancha a su favor al inicio de las eliminatorias lo hayan perdido.
Eso es lo que le ocurrió al Melilla Baloncesto, y por ese motivo sabe que la empresa de cerrar la serie en Pisuerga no va a ser tarea nada sencilla.
Los melillenses saben de la exigencia y las dificultades que presenta un equipo como el Carramimbre Valladolid, especialmente por el peligro de su juego exterior -13 triples con casi un 50% de acierto en el primer partido- y un juego interior corto de rotación, pero polivalente y capaz de jugar en ocasiones todos abiertos, lo que está generando más de un quebradero de cabeza a los de la Ciudad Autónoma.
Ser capaces de controlar estos dos aspectos del juego, mejorar el porcentaje desde el tiro libre y, sobre todo, volver a ser fieles a ellos mismos, es el camino que el decano debe seguir si quiere adelantarse por primera vez en la serie al mejor de tres partidos.
Para este encuentro, Alejandro Alcoba podrá contar de nuevo con la totalidad de la plantilla.
Por su parte, el Carramimbre Valladolid, tras hacerse con el factor cancha, intentará conseguir, ante su afición, cerrar la eliminatoria y lograr lo que sería un autentico éxito para ellos, disputar la Final Four.
Los vallisoletanos son conscientes que en esta serie tienen todo que ganar y nada que perder. Un equipo, el de Paco García, que ha demostrado ser un correoso y capaz de plantarle cara a los melillenses.
Los detalles, así, marcaran las diferencias en una eliminatoria que se está decidiendo con márgenes muy cortos, lo cual erige al factor Pisuerga como vital para ser el juez. Los melillenses, aún favoritos para imponerse, tendrán que sobreponerse a un ambiente hostil y a un conjunto que les ha plantado cara hasta el límite. Las ardillas por su parte, buscarán la machada con menor rotación en el banquillo y meterse en la Final Four sin necesidad de tener que jugar un quinto partido en Melilla, con todo lo que ello supone.
