La Policía Nacional ha constatado en Melilla un aumento del número de denuncias por robos en vehículos en las cercanías de los centros escolares al llevar y, sobre todo, al recoger a los hijos del colegio, momento en el que se producen sustracciones de objetos dejados a la vista. En una nota de prensa, la Jefatura Superior de Policía de Melilla ha señalado que, al tratarse de un estacionamiento provisional de unos pocos minutos, los conductores suelen dejar algún bolso o mochila a la vista, incluso el coche abierto, que en algunos casos es tiempo suficiente para ser víctima de este tipo de sustracciones.
Según los datos de la Jefatura Superior de Policía de Melilla, tomando como base las denuncias ciudadanas de robos o hurtos en interior de vehículos efectuadas desde el 1 de enero al 14 de mayo de este año, se constata que en más del 80 % de los casos, los propietarios se han dejado objetos dentro de los vehículos visibles desde el exterior.
En la mayor parte se trata de bolsos o mochilas que se quedan a la vista, y acaban con su sustracción fracturando una de las ventanillas del coche.
En un alto porcentaje el objeto que se deja a la vista es un teléfono móvil o una tablet, seguido de las prendas de vestir, y en un porcentaje menor estos objetos han sido gafas, cargadores y cables de dispositivos electrónicos, monederos y herramientas, incluso en algunos casos por dejar visibles algunas monedas, cajetillas de tabaco vacías o un mechero.
La Jefatura Superior de Policía ha recordado sus recomendaciones “para no ponérselo fácil a los delincuentes”, y ayudar a este Cuerpo en su labor, ya que insiste en que “la seguridad es cosa de todos”.
