Manix Mandiola, entrenador del Atlético Baleares, comenzaba su análisis incidiendo en que fue “un partido disputado, en el que los dos equipos se mostraron mucho respeto y en el que nosotros para poder defendernos, al contrario de lo que se podía pensar, lo hicimos más con que sin balón, sobre todo en el primer periodo, en el que creo que jugamos muy bien, concediendo nada y generando no demasiado, pero, al menos, fuimos dueños del juego”, apuntó.
Ya en el segundo tiempo, el técnico del cuadro balear explicaba que, “por inercia, poco a poco, el equipo casa se volcó un poco más, asumió más riesgos y, aunque no tuvimos tanto el balón, creamos situaciones de contraataque buenas para poder haber matado el encuentro. De todos modos, considero que “el empate no resultó injusto para nada”.
El preparados del Atlético Baleares aseguraba que los suyos hicieron “un gran trabajo”, argumentada esta afirmación en el hecho de que lograron que “jugadores de mucha calidad no aparecieran”, reiterando que sus futbolistas realizaron “un partido muy serio, el mejor de los tres que hemos jugado en esta fase de ascenso y hay que darle al adversario el valor que tiene, puesto que para mí el Melilla es un rival de entidad y tiene mucho mérito haber empatado”, concluyó.