Las cuatro playas interiores de Melilla reabrieron ayer con normalidad después de la limpieza de la zona que se vio afectada el sábado por un vertido que obligó a izar la bandera negra en La Hípica, San Lorenzo, Los Cárabos e Hipódromo.
La incidencia fue resuelta pocas horas después en las dos primeras, si bien la prohibición del baño se mantuvo en las dos últimas a la espera de comprobar la situación del agua a primera hora de ayer, momento en el que autorizaron su apertura tras la desaparición de la mancha.