La Guardia Civil ha descubierto en el puerto de Melilla 26,1 kilogramos de oro de 18 quilates en forma de joyas ocultos entre pañales de bebé en el interior de un vehículo que desembarcaba del ferry de Almería conducido por un marroquí de 48 años residente en Alicante. Según ha informado este miércoles un portavoz de la Comandancia que dirige el coronel Antonio Sierras, la intervención se produjo el 4 de diciembre, sobre las 08,00 horas y en el desembarque de vehículos procedentes de Almería, en el registro de un turismo marca Audi modelo A-4 con placas de matrículas nacionales ocupado por una persona. Durante la inspección fiscal del turismo y en la zona del maletero se pudo comprobar que llevaba diversas cajas de pañales y una caja de un ventilador. Ocultos bajo estos objetos se localizan 30 cajas de distintos tamaños, en cuyo interior se descubren lo que en un principio parecía ser bisutería.
El portavoz policial ha explicado que el conductor del vehículo manifestó que se trataba de bisutería, pero "gracias a la pericia e intuición de los agentes de la Guardia Civil actuantes y, tras pruebas periciales realizadas, se pudo comprobar y demostrar que se trataba de oro".
Las joyas están elaboradas en distintas formas y tamaños y presentaban una naturaleza distinta a las habituales, al tratarse de un oro muy ligero y diferente, poco común en España.
El valor de las joyas intervenidas asciende aproximadamente a 900.000 euros y queda en calidad de depósito custodiado por la Guardia Civil, a disposición de la Autoridad Judicial que entiende del caso.
La persona que conducía el vehículo y portaba las joyas de oro fino intervenido es un varón de 48 años de edad, de nacionalidad marroquí, y con residencia en Alicante. El conductor del turismo ha sido acusado, en calidad de investigado, por presunto autor de un Delito de Contrabando y otro de Blanqueo de Capitales.
