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La Ciudad suspende tributos, agiliza sus pagos y destinará el superávit a la crisis del coronavirus

Una de las reuniones por videoconferencia en las que está participando Almansouri
(Autor: CAM)

La Ciudad Autónoma ha adoptado una serie de medidas para intentar paliar las consecuencias económicas de la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, entre ellas la suspensión temporal del pago de tasas y tributos, la agilización del pago a proveedores de la Administración y la decisión de destinar todo el superávit de 2019 a este objetivo.

En rueda de prensa, la consejera de Hacienda, Empleo y Comercio, Dunia Almansouri, ha explicado que, en la reunión telemática que el Ministerio de Hacienda celebró el martes con los consejeros autonómicos de este ámbito, se les comunicó la modificación de la aplicación del dinero del superávit, que hasta ahora solo se podía destinar a la amortización de préstamos bancarios e inversiones.
Con motivo de esta crisis sanitaria, ahora también se permitirá a las autonomías emplear el dinero del superávit al gasto social, una medida que la Ciudad Autónoma aplicará al 100 %, de ahí que el área de Hacienda de Melilla haya decidido agilizar la liquidación de 2019 para poder conocer cuanto antes cuánto dinero sobró a la Ciudad Autónoma el año pasado y empezar a disponer de él.
La consejera calcula grosso modo que dicho superávit podría ser de unos dos o tres millones de euros, una cuantía muy inferior a la de años anteriores, que era de entre 18 y 19 millones de euros, debido a que la Ciudad Autónoma no recibió del Estado determinadas partidas relativas a convenios por estar los Presupuestos Generales del Estado prorrogados.
En cualquier caso, esta cuantía se conocerá con exactitud cuando concluya la liquidación de la Ciudad Autónoma de 2019, un objetivo “prioritario para poder seguir trabajando” en paliar las consecuencias económicas de esta crisis sanitaria, que en Melilla tendrá “un impacto importantísimo” debido al cierre fronterizo y su aislamiento por tierra y mar.

Tasas y tributos
En cuanto a la suspensión del pago de tributos y tasas públicas, la consejera ha dicho que esta medida se prolongará hasta que finalice la crisis y, una vez que eso suceda, la Ciudad Autónoma decidirá de qué manera facilita a los ciudadanos esos pagos “para que no sean una carga más por lo que está ocurriendo”.
La Consejería de Hacienda, que estos días está trabajando con todo su personal, sin servicios mínimos, está elaborando un paquete de medidas de apoyo al empleo y el comercio en Melilla, que presentará la próxima semana en el Consejo de Gobierno para su aprobación, una vez que sepa cuánto dinero le corresponde a Melilla del Plan de Contingencia, porque es consciente de que “más allá de la crisis sanitaria, que ahora es lo prioritario, hay que seguir trabajando en medidas de apoyo”.

“Especial apoyo”
Almansouri ha apuntado que el impacto económico que va a provocar esta crisis sanitaria en Melilla fue una de las que trasladó a la ministra en la reunión de ayer, en la que reclamó un “especial apoyo” para Ceuta y Melilla debido a sus “singularidades”, algo sobre lo que la consejera afirma que María Jesús Montero se comprometió a tener en cuenta.
En esa reunión, según ha explicado la consejera, Montero avanzó las medidas del Real Decreto 8/2020 de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente al impacto económico y social del COVID-19, entre ellas el Plan de Contingencia que el Gobierno pondrá a disposición de las autonomías, del que Melilla obtendrá, al menos, el 0,5 %.
Esto supondrá un mínimo de 3 millones de euros que la Ciudad Autónoma también podrá utilizar, además del superávit de 2019, para paliar las consecuencias del coronavirus.
El dinero que reciba Melilla del Plan de Contingencia del Gobierno se dividirá, “no a partes iguales”, entre el ámbito social y el empresarial, con más peso para el primero, ya que “la prioridad es la asistencia social de las familias que no disponen de recursos o que, por esta crisis, puedan ver sus trabajos paralizados”. Después, en una segunda fase, “cuando esto esté más estable”, la intención de la Ciudad Autónoma es centrarse en las ayudas a las empresas.

Liquidez a las empresas
Paralelamente, el área de Hacienda está trabajando para dotar de liquidez a las empresas que trabajan con la administración, agilizando en la medida de lo posible el trámite de las facturas pendientes “para que no sufran de una forma tan acuciante” los efectos de esta crisis.
En este sentido, Almansouri ha informado de que el Ministerio de Hacienda adelantará dinero del Fondo de Suficiencia, que es el que la Ciudad Autónoma recibe por las competencias estatales que tiene asumidas, para que dicha administración pueda tener una mayor liquidez a la hora de afrontar los pagos que debe realizar en estos momentos.
Asimismo, la consejería ha decidido retrasar la autoliquidación del IPSI de marzo hasta el 1 de julio, inicialmente, con la posibilidad de ampliar ese plazo si es necesario. Almansouri dijo que se buscarán los mecanismos apropiados para facilitar a las empresas melillenses el pago sin que les suponga “un ahogo”.

Los planes de empleo, paralizados a la espera de una respuesta del SEPE

La consejera de Hacienda ha informado de que los planes de empleo que se estaban desarrollando han quedado paralizados, ya que los beneficiarios no pueden ser considerados como un personal de servicios mínimos.
La Ciudad Autónoma se encuentra a la espera de que el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) responda si se suspenden los contratos y se reanudan tras la crisis o se adoptan otras medidas. Almansouri ha justificado la medida al recordar que las subvenciones que recibe la Ciudad por los planes de empleo deben ser justificados posteriormentem de ahí que se encuentre a la espera de una respuesta del SEPE.

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Redacción

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