El diputado del PP por Melilla, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, dejó de manifestó ayer que votará hoy en contra de la quinta prórroga del estado de alarma que presentará en el Congreso el presidente del Gobierno Pedro Sánchez, porque considera que puede recurrirse a legislación que no sea excepcional para promover medidas de control ante la pandemia y, al mismo tiempo, permitir la reactivación de la economía nacional y la producción industrial, porque lo contrario solo traerá “el empobrecimiento de España”. El parlamentario recuerda que hoy se reúne el pleno del Congreso de los Diputados para votar la quinta prórroga del Estado de Alarma que se activó el 14 de marzo. Dijo que en las tres primeras ocasiones el PP, “sin ser consultado” por el Gobierno, dada la situación de la pandemia respaldó la prórroga porque “entendió que por responsabilidad procedía mantenerla dado que no se habían adoptado medidas preventivas inicialmente y de ejecución activa de control con posterioridad”.
En todas estas ocasiones Pablo Casado planteó a Pedro Sánchez que convenía adoptar medidas que contribuyesen a paralizar la pandemia y a poner en marcha la actividad productiva porque “una detención del país sine die produciría daños económicos de los cuales nos costaría trabajo resarcirnos”.
Voto en contra
A la hora de proponer la cuarta prórroga, entiende Otazu que el PSOE “planteó el órdago de vincular el estado de alarma a la posibilidad de que los trabajadores acogidos a n ERTE pudieran seguir cobrando”, pero el PP le planteó que era una “postura inadmisible, que debía desvincular los ERTES del Estado de Alarma y, recurriendo a otra figura legislativa, poder generar las condiciones posibles para reactivar la economía” y posibilitar, en un proceso que llevará su tiempo, que las empresas puedan reactivarse y recuperar a sus trabajadores.
“En esa cuarta petición el PP dijo que había que adoptar medidas que fueran progresivamente haciendo innecesario el mantenimiento del estado de alarma, de una legislación excepcional, porque hay legislación ordinaria a la que recurrir, pero no se atendieron las propuestas de los populares”, afirma el diputado por Melilla. Insiste en señalar que a medida que avanzan las semanas “la actividad productiva se ve más deteriorada y su capacidad de recuperación y vuelta a la normalidad absoluta se hace cada vez más compleja”. Por todos estos motivos, anunció que el PP votará hoy en contra de la quinta prórroga, y defienden que no es cierta la tesitura que plantea el PSOE de que “si se apuesta por la economía se pone en juego la salud”.
Plan B y C
Recordó que el PP ha planteado un plan B al estado de alarma, denominado Activemos España, que se apoya en tres pilares: el sanitario, el económico y el jurídico. En el sanitario se plantea adoptar medidas proactivas como que el personal sanitario tenga el material de protección que precisa, que los ciudadanos salgan de su casa con mascarillas y que se proteja a la población vulnerable como los mayores.
En el sector económico, “regenerar el tejido empresarial porque no podemos embarcarnos en la dinámica permanente del subsidio mientras se destruye el tejido empresarial”. Afirma que cuando el Gobierno habla de aumentar los impuestos, en realidad no afectará a las grandes fortunas porque minimizarán el impacto de sus cuentas fiscales actuando en otros países, y la carga repercutirá en la clase media. El tercer pilar es “la vuelta a la normalidad jurídica y la legalidad ordinaria, abandonando una legislación excepcional por otra ordinaria que permitir controlar el movimiento de personas, como por ejemplo la Ley General de Salud con una mínima modificación”. Afirma que “es preciso generar riqueza, porque un consumo baldío solo provocará que España se empobrezca. Hay que apostar por las empresas para que recuperen empleo”. Señala que el PP, más que un plan B, propone un plan C porque apuesta “por la credibilidad, la confianza, el crecimiento, la capacidad de creación de empleo”.
El PP no alienta protestas
El diputado por Melilla negó que el PP esté alentando las protestas sociales que empiezan a surgir en la calle contra el Gobierno de Pedro Sánchez, sino que estos hechos responden “al agobio y desasosiego de la ciudadanía española que no ve salida a la situación actual en manos de este gobierno y sus planteamientos”.
Afirma que Pedro Sánchez debe escuchar a los ciudadanos y también a la oposición, que asegura “no pretende tumbar al Gobierno, sino promover iniciativas, como las más de tres mil presentadas y que no se están atendiendo”.
