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El agente en el puesto fronterizo de Beni-Enzar le indicó que tenía que fiscalizar sus pertenecías pero el acusado se opuso y les insultó

La Fiscalía pide 3 meses de prisión a un hombre por insultar y escupir a un guardia civil

Los hechos ocurrieron el puesto fronterizo de Beni-Enzar el 8 de agosto de 2016

El Ministerio Fiscal pide una pena de 3 meses de prisión a un hombre por insultar y escupir a un guardia civil. Los hechos ocurrieron en el puesto fronterizo de Beni-Enzar cuando el guardia civil le indicó que tenía que detenerse para fiscalizar sus pertenencias, pero el acusado se opuso diciéndoles "policías de mierda, sois una basura". Finalmente el investigado mostró su conformidad ante los hechos que se le atribuían. El juez titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Melilla ha impuesto una multa de 90 euros y un mes en el Centro Penitenciario a un hombre por empujar, insultar y escupir a un guardia civil en el puesto fronterizo de Beni-Enzar. Se trata de un delito de desobediencia grave a la autoridad aunque al mostrar su conformidad ante los hechos ocurridos la pena fue rebajada.

Hechos
Los hechos ocurrieron el 8 de agosto de 2016 en la frontera de Beni-Enzar, en el puesto entre Marruecos y Melilla. El guardia civil implicado explicó que el acusado iba en coche y no realizó el stop. Entonces tuvo que darle un golpe en el cristal para que se parara pero el investigado decía que no tenía que detenerse. Finalmente se apeó del vehículo, abrió el maletero y el agente le indicó que tenía que bajar las pertenencias para ser revisadad. Se negó y le dijo: "no toque mi vehículo". Acto seguido el guardia civil le insistió que tenía que sacar su mercancía, pero manifiesta que no entendió a razones y acabó insultándole diciendo que "él no era nadie para hacer nada, policías de mierda, sois una basura".

Otro guardia civil que estaba viendo la escena, decidió acercarse y acompañar al acusado a la garita para que el otro agente pudiera proceder con la fiscalización de las pertenencias mientras la mujer del acusado y la hija permanecían dentro del vehículo. Una vez en la cabina, el guardia asegura que el procesado le empujó en varias ocasiones y le escupió en la cara. El otro agente a través del cristal afirma que fue testigo de los hechos y por ello le llevaron a los calabozos del puesto fronterizo.

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Lorena Japon

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