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Un nuevo equipo de seis educadores de calle vuelve al trabajo con menores durante 45 días

El consejero, junto a los seis nuevos educadores de calle

El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, presentó ayer a los seis educadores de calle que a partir de esta semana y por un periodo de 45 días realizarán intervenciones de calle con los menores extranjeros no acompañados que viven a la intemperie. Indicó que el objetivo que se persigue es que puedan ser convencidos y llevados a centros de acogida. Se trata de un contrato menor, con un coste de 17.870 euros que ha sido adjudicado a la empresa Clece. Explicó el consejero que el concurso para adjudicar el programa de educadores de calle a través de un contrato mayor, con una duración de cuatro años, ha quedado desierto incluso después de su exposición en el Boletín de la Unión Europea. El motivo, un problema en la cuantificación económica, que obligará a una nueva elaboración de los pliegos y a un nuevo concurso.

Educadores
Entre tanto, se ha optado por poner en marcha el programa a través de un contrato menor en el que han participado las empresas Clece, Eventos Melilla y Eulen. El contrato se ha adjudicado a la primera por 17.870 euros y una duración de 45 días. En concreto lo gestionarán seis trabajadores: dos auxiliares educativos, dos integradores sociales y dos educadores sociales.

El objetivo del contrato es la intervención en el medio abierto, integrando un conjunto de actividades preventivas y de atención de carácter socioeducativo dirigido a los adolescentes y jóvenes de la calle. "Se detectará a estos jóvenes en situación de riesgo y conflicto social, procurando que inicien un proceso de evaluación de alternativas positivas a su estancia en la calle", dijo. Se realizarán intervenciones educativas individuales y grupales "tendentes a promover el desarrollo integral de los jóvenes en situación de riesgo".

El equipo de educadores, que comenzará a partir del lunes y que estarán en activo durante 45 días, estarán coordinados con la Consejería y la Policía, así como los servicios sanitarios para responder a cualquier necesidad que tengan los jóvenes detectados para ser atendidos cuanto antes. Semanalmente se presentará un informe de gestión. El trabajo que se llevará a cabo busca, con la atención individual y grupal, "intentar sacar a los niños de la calle y cubrir las necesidades que encontremos".

Contrato mayor para cuatro años
Daniel Ventura manifestó que la intención de la Consejería es la de lograr que el programa de educadores pueda tener una estabilidad y duración en el tiempo, porque considera que es una atención necesaria. Dijo que el contrato menor de Clece no se podrá prorrogar, pero que se aprovechará el tiempo para sacar a concurso un contrato mayor de un año de duración que no precisará que se publique en el Boletín de la Unión Europea. Su idea es que se pueda adjudicar en el plazo de dos meses.

Además indicó que también se trabajará en la elaboración del pliego de condiciones del que sería el contrato mayor para adjudicar el servicio de educador de calle por un periodo de cuatro años. Este procedimiento, obligado por los plazos legales, podría estar listo para finales de año.
"Queremos que este servicio esté sujeto a continuidad, porque hay urgencia de ello. Tenemos una presión migratoria que se ve en la calle, con menores extranjeros no acompañados que nos llegan con problemas médicos a los que tenemos que atender, aunque ellos se niegan a eso, por eso tendremos los equipos de educadores de calle para intervenir".

Aseguró el responsable de Servicios Sociales que por parte de la Consejería "la motivación es total" para que estos contratos sean una realidad.

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Jesús Andújar

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