Fidel Moga, secretario ejecutivo del PSOE local, ha recogido las quejas de los ciudadanos que en las últimas semanas han sufrido cortes de agua, recordando que el acceso a los recursos hídricos debería estar totalmente garantizado durante las 24 horas en toda la ciudad, y que para ello es imprescindible la instalación del cuarto módulo de la desaladora. Moga culpó de que el módulo no haya sido instalado todavía al inmovilismo y la “pleitesía hacia Madrid” de Imbroda, quien ha sido “incapaz” de exigírselo a Rajoy. El secretario ejecutivo de los socialistas locales, Fidel Moga, ha salido al paso de las quejas de la ciudadanía melillenses por los cortes y las restricciones de agua que padecen muchos barrios de la ciudad y ha exigido al Gobierno la instalación de un cuarto módulo de la desaladora.
Según Moga, “todo el mundo debería tener accesibilidad al agua las 24 horas al día” aunque lamentó que haya ciudadanos de barrios como Cabrerizas, Ataque Seco o El Real, que no pueden disponer de ese suministro de agua garantizado las 24 horas del día, “porque el agua es de todos, porque todos contribuimos al mantenimiento del agua, están padeciendo cortes y restricciones”, explicó.
Unas restricciones que desde el PSOE se atribuyen al hecho de que, “a pesar de que el cuarto módulo de la desaladora debería ser ya una realidad”, todavía no se ha construido esta expansión de una infraestructura que crítica para la vida y el día a día de los ciudadanos.
En ese sentido, Moga pidió al consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, que explique a la ciudadanía “por qué no se puede suministrar agua a todos los barrios de Melilla”, y apuntó que es responsabilidad de la Ciudad Autónoma el hacer efectivo ese derecho de acceso al agua de todos los ciudadanos.
Para los socialistas, la responsabilidad de los cortes recae directamente sobre el presidente Imbroda, dado que su “pleitesía hacia Madrid” ha evitado que esté operativo ya el tan necesitado cuarto módulo de la desaladora. Moga recordó que Imbroda conoce el problema existente con el agua desde hace años, y achacan el problema actual a su inmovilismo; “no ha tenido la capacidad ni el peso político de exigirle al Gobierno de Mariano Rajoy que incremente su esfuerzo inversor para tener listo el cuarto módulo”.
