Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Le piden 18 meses de cárcel por agredir a un Guardia en Beni Enzar yendo ebrio

El pasado 10 de enero, el acusado, un ciudadano marroquí que cargaba con dos grandes fardos de zapatillas viejas, trataba de acceder a Marruecos saltándose el control fiscal de la Guardia Civil por el acceso de vehículos cuando fue “pillado” por un agente que salió tras el, interceptándolo y, tras forcejear con él, consiguiendo reducirlo y engrilletarlo. El acusado, que se encontraba en estado de embriaguez, supuestamente habría echado a correr tras ignorar el alto del agente y, al ser interceptado, habría agredido y amenazado a éste último con quemarle “la casa y el coche”. El Ministerio Fiscal pidió para el acusado un total de 18 meses de prisión y 480 euros de multa. El miércoles día 10 de enero de 2018, sobre las nueve y media de la noche, en el lado español del paso fronterizo de Beni Enzar, se produjo un altercado entre un porteador y un agente de la Guardia Civil, cuerpo encargado del resguardo fiscal de la frontera.
Según el testimonio del agente que recibió la agresión, el acusado fue “pillado” mientras intentaba cruzar la frontera en dirección a Marruecos por el carril de acceso de vehículos, una zona no habilitada para el paso de peatones, “escondiéndose” entre los coches y tratando de pasar desapercibido.
El motivo de dicho intento de evadir el paso peatonal era que el acusado llevaba colgados dos fardos de “zapatillas viejas” (de aproximadamente 25 kilogramos cada uno) y era consciente de que, colándose por el paso de vehículos, eludía el control fiscal de la Guardia Civil.
Al percatarse el agente de que el acusado trataba de saltarse el control por una zona no habilitada le dio el alto. El acusado no sólo hizo caso omiso de las órdenes del Guardia Civil sino que “echó a correr” con los fardos al hombro, provocando que el agente saliese en su persecución, interceptándolo antes de que entrara en territorio marroquí.
Al interceptar el agente al acusado, éste se revolvió, “soltando los brazos” para agredir al Guardia. La resistencia fue tal que el agente se vio obligado a tirarle al suelo para inmovilizarle, momento en el que el acusado, según el testimonio aportado por otro de los agentes que fue testigo de los hechos, comenzó a “pegarle puñetazos en las piernas e intentar morderle”.
Al ser engrilletado, el acusado supuestamente profirió amenazas contra el agente; “Cuando te vea en Marruecos, que se que vas mucho, voy a ir a por ti”, “me he quedado con tu cara” o “te voy a quemar la casa y el coche”, fueron algunas de las amenazas proferidas por el acusado.
El agente actuante, que declaró no haber sufrido lesión alguna, afirmó que el acusado estaba en un evidente estado de embriaguez, ya que “desprendía un fuerte olor a alcohol y tenía los ojos vidriosos”.
El acusado no pudo ofrecer su versión de los hechos puesto que no se personó en el juicio, que se celebró en su ausencia por ser la pena inferior a dos años de cárcel.

Conclusiones
El Ministerio Fiscal, que en un principio había imputado al acusado un delito de resistencia a la autoridad, elevó la calificación del delito a “atentado contra la autoridad” a la luz de que el acusado acometió contra el agente, golpeándole y amenazándole.
Por este delito de atentado, el Ministerio Público interesó para el acusado, quien no tiene antecedentes penales en España, la imposición de una pena de 18 meses de prisión por un delito de atentado más el pago de una multa de 480 euros por un delito de lesiones.
La defensa pidió la libre absolución de su patrocinado, argumentando en contra de la veracidad de las declaraciones de los Guardias Civiles, toda vez que no se habían referido lesiones. En caso de condena, el letrado interesó la consideración de la embriaguez de su cliente como posible atenuante.

Loading

Fernando Lamas Moreno

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€