Coalición por Melilla (CPM) pidió ayer a la Ciudad Autónoma y la Delegación del Gobierno que en sus reuniones para abordar los problemas que sufre la economía local no solo cite a la Confederación de Empresarios (CEME-CEOE), sino también a la Plataforma de Empresarios de Melilla. Esta plataforma, integrada por empresarios, comerciantes y hosteleros de la ciudad, organizó el pasado 21 de marzo una concentración para reclamar soluciones para la frontera entre Melilla y Marruecos, a la que acudieron más de 2.000 personas, y que contó con el apoyo de toda la oposición en la Asamblea.
La vicepresidenta segunda de la Asamblea y diputada de CPM, Dunia Almansouri, hizo ayer esta petición al recordar que la plataforma es “totalmente apolítica” y “está reivindicando un lugar en las mesas de reuniones para plantear de forma seria y con datos reales sugerencias y medidas para mejorar la situación económica”.
“No nos vale que el presidente diga que se va a reunir con la CEME”, aseveró Almansouri para señalar que esta organización empresarial, además de ser “afín” a la Administración, “no representa a todas las entidades”.
La diputada cepemista, tras repasar los últimos titulares de prensa sobre el ámbito económico, educativo y sanitario de Melilla, instó al presidente melillense, Juan José Imbroda, y al delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, a que “se sienten ellos dos como máximos responsables de la ciudad y plantearse unos objetivos de mejora para Melilla”.
A su juicio, es necesario que ambos “se pongan de acuerdo” porque, según dijo, “parece que últimamente no se ponen muy de acuerdo en cuestiones importantes”, y les instó a “ceder el paso a quienes puedan hacer cosas por Melilla si no están capacitados ni tienen ideas suficientes para mejorar la situación”.
“El barco hace aguas”
“Melilla se nos está yendo de las manos, tenemos que hacer algo de una vez por todas para solucionar todos estos problemas”, aseveró Dunia Almansouri, convencida de que “el barco hace aguas por todas partes”, ante lo cual Imbroda y El Barkani “se tienen que poner manos a la obra”.
