El C.D. Gimnástico Melilla intentará este domingo poner fin a su mala racha y mejorar así sus sensaciones en esta recta final de Liga, con una victoria ante el Balonmano Alcobendas, penúltimo clasificado del Grupo F de la Primera División Estatal, después de haber encajado cuatro derrotas consecutivas, la última ante el líder, el Cajasur de Córdoba (32-23). El encuentro, correspondiente a la jornada vigésimo séptima, se disputará en el Pabellón Municipal Lázaro Fernández, a partir de las 13’15 horas. El plantel amarillo reanudó los entrenamientos el pasado martes, de cara a preparar el próximo compromiso liguero ante el conjunto madrileño. Para este choque, Faisal Salmi, entrenador del Gimnástico Melilla, podrá contar con todos sus efectivos, aunque David Álvarez sigue arrastrando molestias en su brazo izquierdo.
Por su parte, el BM. Alcobendas intentará sumar los dos puntos en juego para lograr la permanencia matemática, aunque los locales se han marcado como objetivo ganar sus dos últimos encuentros de la competición como local.
A este respecto, el preparador del Gimnástico indicó que la afición melillense se merece una satisfacción y «vamos a intentar brindarle la victoria, pero además tenemos ánimo de revancha por el partido de la primera vuelta, que perdimos por 28-26, con un arbitraje malísimo, así que iremos a por toda en este encuentro, como solemos hacerlo siempre».
«Estamos salvados desde hace varias jornadas y sólo nos queda el orgullo de sumar los máximos puntos posibles en estas últimas cuatro jornadas», añadió.
Por último, analizó la derrota de su equipo en la cancha del líder, el Cajasur de Córdoba. «La derrota fue totalmente justa, en un partido de querer y no poder ante un rival que ha tenido más intensidad defensiva, posición en la que no estuvimos bien, sobre todo en la primera mitad. El rival marcó el tiempo del encuentro en todo momento, demostró ser un equipo superior al nuestro y no le puedo reprochar nada a mis jugadores», concluyó Faisal Salmi.
