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CPM acusa al PP y a Paz Velázquez de prevaricar con su “bloqueo” a la Comisión de Control

El presidente de CPM y líder de la oposición, Mustafa Aberchán

Coalición por Melilla (CPM) acusó ayer al Grupo Popular y al Grupo Mixto -representado por Paz Velázquez- de prevaricar y “obstruir los órganos” de la Cámara con su negativa a asistir a la Comisión de Control de Licitaciones, presidida por el portavoz cepemista, Hassan Mohatar. En rueda de prensa, el presidente de CPM y líder de la oposición, Mustafa Aberchán, explicó que su partido, después de convocar una sesión de la Comisión de Control para estudiar la contratación menor del Gabinete de Presidencia desde enero de 2016, ha recibido un escrito del PP donde exponen su negativa y la del Grupo Mixto a ir. Aberchán leyó el escrito “prevaricador” del PP, en el que el PP alega su “enorme perplejidad ante la actuación política de CPM, con permanentes amenazas de llevar a la Justicia temas de carácter administrativo, que en caso de discrepancias deben verse en el seno de los órganos de la Asamblea”.
El líder de la oposición se mostró muy crítico con la decisión del PP, al que acusó de vulnerar el derecho que tienen los cepemistas de recurrir a la Justicia cuando consideren oportuno, argumentando para ello “el derecho que tienen los parlamentarios como representantes del Pueblo”.
Aberchán advirtió al Grupo Popular y al Grupo Mixto en la Asamblea de Melilla de que su partido va a convocar una nueva Comisión de Control, y si se niegan a asistir, CPM “no tendrá más remedio” que denunciar ante la Justicia a los diputados de ambos grupos, entre ellos sus portavoces, Daniel Conesa y Paz Velázquez, que son a su vez los dos vicepresidentes del Gobierno melillense.
A juicio de Aberchán, la negativa del PP y el Grupo Mixto a asistir a la Comisión de Control se debe no solo a las denuncias que CPM ha presentado en los tribunales, sino porque “les incomoda el tema de la contratación menor” del Gabinete de Presidencia, un asunto que está en vía judicial y sobre el que los cepemistas tienen “muchas sospechas” de supuestas irregularidades.

“Un deber”
Aberchán recordó que, tal y como establece el Reglamento de la Asamblea, acudir a sus órganos es “un deber”. “Esto no es un capricho ni la Granja de San Imbroda, es la Casa del Pueblo y se tiene el deber de participar. Si no van, tendrán que justificarlo, pero no por capricho político o porque no les guste el tema a tratar”, aseveró el líder cepemista.
Al hilo, se mostró convencido de que “si el PP tuviera enterocolitis activa y justificara entre todos que no pueden acudir porque tienen diarrea por el asunto a tratar, tendría más sensatez que este escrito”.
Aberchán insistió en que la decisión de los populares produce “daño” al Pueblo de Melilla y supone “una prevaricación y una obstrucción sin tener ningún reparo en cuidar las formas”, lo que se traduce en “una ofensa al Pueblo, a los grupos de la oposición y a los medios de comunicación”.

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Redacción

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