El decano volvió a ganar ayer, esta vez al Sáenz-Horeca Araberri (90-66), y ya acumula tres victorias consecutivas, aunque lo más importante es que los de Alejandro Alcoba certifican el quinto puesto matemáticamente y, por tanto, contarán con el factor cancha en la primera eliminatoria de los play off de ascenso. El Melilla Baloncesto volvió a ganar ayer, esta vez al Sáenz-Horeca Araberri (90-66), y ya acumula tres victorias consecutivas, aunque lo más importante es que los de Alejandro Alcoba aseguran la quinta plaza matemáticamente y, por tanto, contarán con el factor cancha en la primera eliminatoria de los play off de ascenso.
Lo cierto es que los melillenses comenzaron el encuentro de forma inmejorable, firmando un 9-2 de salida, gracias fundamentalmente al acierto de Filip Djuran, autor de los primeros siete puntos de su equipo. Los vitorianos fueron reaccionando y metiéndose en el choque con el paso de los minutos, consiguiendo situarse a un solo punto (11-10) mediado este cuarto inaugural.
Tras unos minutos con intercambio de canastas, los locales tomaron de nuevo las riendas del choque, consiguiendo abrir una brecha de ocho puntos en los instantes finales (24-16 y 26-18), acabando este acto, tras anotar Fran Guerra, con el resultado de 28-21.
El segundo asalto se desarrolló con bastante igualdad, aunque siempre con los de Alejandro Alcoba llevando la iniciativa en el luminoso. Araujo mantenía a flote a los vascos, mientras que en los azulones Guerra y Juan Rubio eran los referentes ofensivos. Así, se llegó a los tres últimos minutos con 41-37 favorable a nuestro representante que en ese intervalo de tiempo lograría un 11-4 de parcial para irse a los vestuarios con once puntos de ventaja (52-41).
El tercer acto fue el más reñido, con las defensas imponiéndose de manera clara a los ataques, anotando únicamente entre los dos equipos 23 puntos. Los doce del decano fueron obra de Filip Djuran (5), Juan Rubio (3), Massine Fall (2) y Mamadou Samb (2). El Melilla Baloncesto gozaría de una máxima renta de quince puntos (58-43), aunque al término de este periodo el marcador indicaba un todavía tranquilizador 64-52.
En el cuarto periodo, el conjunto melillense supo en todo momento controlar el partido, con rentas superiores a la decena de puntos, esperando el instante oportuno para romper definitivamente el choque, con un gran trabajo atrás y con un excelente acierto desde más allá del arco de 6’75. No en vano, hasta cinco lanzamientos de tres convirtieron los de Alejandro Alcoba, dos de Edu Durán, además seguidos, uno de Pablo Almazán, otro de Mamadou Samb y el último a cargo de Fran Guerra.
La ventaja de los locales alcanzaría los 25 puntos (90-65), a escasamente dos minutos del final, con dos tiros libres de Luis García, jugador del CAM Enrique Soler. El duelo acabaría con el visitante Newby en la línea de personal, anotando solo uno de los dos de que dispuso, después de cometer falta Luis García. Con un contundente 90-66 en el electrónico llegó a su término el penúltimo encuentro de la competición regular para los melillenses, que cerrarán esta primera parte de la temporada el próximo viernes en Castellón. Ya dentro de dos semanas arrancarán los play off y, quizás, el TAU Castelló sea el rival del decano. Para que eso ocurra, los castellonenses tienen que ganar a los azulones o si pierden que también lo haga el Chocolates Trapa Palencia. Si no se cumple, al menos, uno de esos dos requisitos serán los palentinos a los que tenga que enfrentarse el equipo de la ciudad autónoma.
