El Ministerio publicitó a bombo y platillo en su día la inauguración de las dos aulas: TEA y Avanza, que actualmente existen en tres centros de nuestra ciudad, como dos programas estrella. Ambos programas fueron bien recibidos por todos –entre ellos SATE-STEs-, dada su necesidad y la utilidad para cubrir una carencia notable en la atención a la diversidad.
En estos días el Subdirector Adjunto de Evaluación y Cooperación Territorial del MECD Don Santiago Piñel Vallejo está visitando estas aulas para conocer de primera mano el desarrollo de éstas. Pero son las muchas inquietudes y quejas del profesorado con respecto a la realidad de estas aulas que atienden a alumnado con diversas aptitudes y necesidades, pues su puesta en marcha ha salido adelante más por la buena voluntad y el esfuerzo de los docentes que las atienden que por el cumplimiento de los compromisos adquiridos por el Ministerio, que trata a sus joyas como bisutería barata.
SATE-STEs le recuerda al MECD que, según la Ley Orgánica del 2013 para la Mejora de la Calidad Educativa, corresponde a las Administraciones educativas asegurar los recursos necesarios para este tipo de alumnado. Sin embargo, a lo largo de estos dos cursos escolares venimos comprobando como en esta dotación que nos garantiza la normativa se han detectado irregularidades en tiempo y forma.
Por fin superada la falta de un especialista de Audición y Lenguaje a tiempo completo (que es lo que exige la legislación) en el aula TEA del CEIP Reyes Católicos del curso pasado, tanto en este centro como en el CEIP Pedro de Estopiñán, se sigue sufriendo la carencia en plantilla de un cuidador. Cierto es que estos puestos se vienen cubriendo con los Planes de Empleo o con Técnicos de Educación Infantil, pero esta situación dificulta la continuidad y adaptación de estos niños y niñas al estar en manos de un personal que va y viene (a pesar de su profesionalidad) dificultando así una atención de calidad y sin asegurar su presencia durante todo el curso. Además, seguimos insistiendo en la necesidad de cubrir un puesto de AL en el Estopiñán, a día de hoy sin contratar, pues continúan sin atenderse a 17 alumnos TEA a pesar de las promesas de su contratación… ¡Ya nos van cansando las promesas no cumplidas!
Y si nos detenemos en la dotación de recursos materiales la situación es aún si cabe peor. Un aula TEA -en el Estopiñán- con un espacio ridículo para niños con más necesidad de movimiento, y un equipamiento material que llega tarde en tiempo y forma tras la insistencia del profesorado. En el aula Avanza del CEIP Eduardo Morillas la situación es aún más desoladora, pues a estas alturas del curso tanto el equipamiento como la partida económica adicional prometida por el MECD es “cero”. Este alumnado de altas capacidades está funcionando con algunos ordenadores rescatados y gracias al sobresfuerzo de su profesor.
Y si hablamos de la formación que el MECD debe proporcionar al profesorado que atiende a este alumnado, continuamos viendo ausencias e incoherencias. A pesar de estar funcionando el aula Avanza, el INTEF no ha ofrecido ni un solo curso sobre alumnado con altas capacidades. Formación para aulas TEA sí que ha habido, pero nos preguntamos si no hubiera sido más coherente que el profesorado se hubiese formado antes de trabajar con este alumnado ¿Dónde está la formación inicial?
Todos estos incumplimientos propician una inadecuada atención a la diversidad y un malestar en el profesorado. Por ello, y comprobando que las gestiones del MECD avanzan “a paso de tortuga”, SATE-STEs demanda para estas aulas una mayor cantidad de recursos, una agilización en la dotación de material y presupuestos, así como actuaciones eficaces y coherentes.
