El C.D. Gimnástico Melilla cerró el pasado sábado la temporada en la cancha del Balonmano Caserío Ciudad Real, donde perdió por 33-24, aunque el balance del entrenador melillense, Faisal Salmi, «es bastante positivo», ya que se ha conseguido la permanencia «con una plantilla corta y con bastantes problemas por lesiones y bajas por motivos laborales en la segunda parte de la competición. Además, resaltó el gran compromiso de sus jugadores, «con un noventa por ciento de efectivos de la tierra». El entrenador del conjunto melillense se mostró satisfecho con la temporada de su equipo, ya que se consiguió de la permanencia y se ha clasificado en la undécima posición, empatado a 22 puntos con el décimo, el BM. Triana. «Afortunadamente, ya terminó la temporada, por lo que ahora toca descansar y desconectar, después de haber disputado un campeonato largo y complicado. Hemos contado con una plantilla my corta en los últimos meses por las bajas laborales y de lesiones, pero el balance es bastante positivo, pues hemos mejorado la clasificación y la puntuación de la pasada temporada, aunque es cierto que podíamos haber terminado algo mejor, pero no se le puede reprochar nada a la plantilla. El grupo ha desempeñado sus funciones lo mejor que ha podido, compaginando su vida profesional con el balonmano», explicó Faisal Salmi.
Por último, analizó lo que fue la derrota en Ciudad Real ante el quinto clasificado. «Acudimos al partido con los deberes hechos y con la idea de disfrutar del partido, en el que completamos una primera parte bastante buena y dimos la cara, pese a contar con un noventa por ciento defectivos de la cantera, de jugadores muy jóvenes. Sin embargo, en la segunda mitad, el conjunto manchego apretó y tuvimos más problemas en la defensa, lo que aprovechó para ganar el encuentro, haciendo valer su condición de favoritos por clasificación y por jugar en su cancha de juego», concluyó el entrenador del C.D. Gimnástico Melilla.
