Se acerca el último choque de la temporada regular, noventa minutos de infarto que pueden dejar a la U.D. Melilla dentro de los puestos de liguilla o a un paso de ellos. Para hablar de tan trascendental cita, uno de los capitanes del equipo, Nando de la Rosa, tomó la palabra en la sala de prensa del estadio. Deseó el sevillano que esta rueda de prensa sea la del último partido, «pero de la liga regular». De la Rosa señaló que todo pasa por «sacar, sí o sí, los tres puntos de Granada y esperar el resultado de Almendralejo», aunque apuntó que los unionistas tienen que centrarse solamente en su partido ante el filial granadino. «Estamos seguros de que nuestro partido no va a ser fácil, podremos todas nuestras fuerzas en él porque, de no conseguir la victoria, de nada valdría todo lo demás», señaló.
El jugador andaluz admitió que, llegados a este punto, a todo el mundo le gustaría acabar con un final feliz, aunque pase lo que pase catalogó la temporada como muy buena. El azulino piensa que «se ha trabajado mucho», y le ha dado valor a estar actualmente empatados a puntos con el Extremadura, «con el potencial que tiene».
Reconoció que el premio de la Copa del Rey sería bueno, pero aseguró que está centrado «en conseguir los tres puntos del domingo», ya que confía en que el Betis Deportivo «saldrá a competir en Almendralejo». El Real Betis a nivel de institución «está mejorando mucho en todos los sentidos, incluyendo la organización de la cantera, y estoy seguro de que querrán quedar lo más arriba posible», continuó. «Están mejorando demasiado como para no cuidar esos detalles y que los chavales, en el último partido, se quieran dejar ir».
El mediocentro, bético confeso, admitió que lleva toda la semana bromeando sobre el tema con los suyos. «Mi familia es muy bética desde siempre y el primer equipo nos ha dado una alegría metiéndose en Europa League, y ahora estamos convencidos de que el segundo nos la dará a nosotros», apuntó.
Además, confesó que «hay muchas ganas de luchar» en el vestuario, porque son conscientes de que «se juegan la temporada entera». En fútbol «todo puede pasar, el Extremadura tiene su partido por ganar, así que en lo único que tenemos que pensar es en nosotros mismos. La ilusión es máxima porque, de clasificarnos, tendríamos la alegría por la que llevamos peleando los últimos años», advirtiendo, eso sí, que enfrente tendrán un equipo «muy complicado, «un filial atípico que aúna veteranía y juventud».
Finalmente, el sevillano dijo encontrarse muy bien físicamente y «disfrutando de una pelea por los Play-Offs que cuesta mucho conseguir. Ojalá que salga todo como queremos, vamos mentalizados al partido y se nos tiene que ir la vida en este encuentro».
