Mustafa Aberchán, líder de CPM e imputado en el caso del Voto por Correo, quiso aprovechar su derecho a la última palabra en la última sesión del juicio celebrada ayer. El líder cepemista comenzó tratando de hacer ver a los presentes el sufrimiento al que ha sido sometida su familia durante estos 10 años y el perjuicio personal, político y profesional que la causa le ha provocado. Posteriormente, Aberchán pasó a la ofensiva señalando al PP como el artífice de una trama para destruirle, ya que consideró que todos los actores de la acusación estaban contaminados por el dinero público, un dinero que, con fines electorales, ha servido para mantener el proceso abierto durante estos 10 años. Mustafa Aberchán, líder de CPM y diputado de la Asamblea por este mismo grupo, quiso hacer uso de su derecho a la última palabra para abordar el proceso desde el enorme perjuicio, tanto personal como familiar, político y profesional que le ha producido la acusación ejercida contra él por la supuesta trama del Voto por Correo, “han sido 10 años de espera que han hecho mucho daño a mi familia”, afirmó Aberchán, quien destacó que su trayectoria política de 25 años “habiendo sido presidente, habiendo gestionado 100 millones de las antiguas pesetas y presupuestos de 250 millones […] y nunca he tenido ninguna comparecencia judicial”, hasta, según afirma, su periodo de actividad en la oposición, donde las denuncias y los procesos judiciales -según sostiene- se han agolpado siempre en época de campaña electoral.
Aberchán también quiso mostrar cómo el caso ha afectado a su vida profesional, condicionando su reputación como cirujano, “la gente piensa: me va a operar un delincuente”, algo que le ha producido “una gran frustración”.
Por último, cargó duramente contra el PP y el Ministerio Público, afirmando que “en efecto, hay una trama, una asociación ilícita, pero en sentido contrario”, señalando al Partido Popular. Así mismo, consideró que la Fiscalía “no transmite imparcialidad” ya que “todos los actores que nos acusan están contaminados con dinero público”. Aberchán finalizó su intervención acusando al PP de haber mantenido la acusación durante 10 años “con dinero público” y “fines electorales”, haciendo gala de un comportamiento “poco ético”.
