La Guardia Civil ha intervenido 2.198 pastillas psicotrópicas que fueron enviadas desde Málaga en un paquete postal a Melilla, cuyo destinatario está siendo investigado como supuesto autor de un delito contra la salud pública. La Comandancia de la Guardia Civil ha informado de que estos medicamentos fueron enviados en un paquete declarado como productos capilares, y fueron localizados en la oficina de Correos, después de que su destinatario se diera a la fuga al ir a recogerlo y ser informado de que estaba en la aduana, custodiado por el instituto armado. Ante la sospecha de que el contenido del paquete contuviera alguna sustancia prohibida o peligrosa, la Guardia Civil activó el protocolo de actuación y dispuso su apertura con las medidas oportunas de seguridad, comprobando que su contenido eran medicamentos.
En el interior del paquete había 10 cajas, con 98 blísteres, de un medicamento cuyo principio activo es el clonazepam, y otros 15 botes con un contenido de 728 pastillas de otro medicamento cuyo principio activo es el alprazolam.
En total sumaban 2.198 pastillas, cuyo principio activo principal es la benzodiacepina, perteneciente al grupo de sustancias con actividad ansiolítica, hipnótica, miorrelajante y antiepiléptica, y cuya dispensación requiere siempre prescripción facultativa, además de en serio control en toda su cadena de custodia.
El informe que ha elaborado la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios sobre las muestras remitidas por los agentes investigadores ha concluido que este caso constituye un serio atentado contra la salud pública, al poderse desviar su consumo sin las garantías sanitarias que lo regulan.
La línea de investigación ha concluido con la certeza de que la persona que facturó el paquete desde Málaga utilizó una identidad falsa.
La Guardia Civil localizó a la persona que acudió a la oficina de Correos a recogerlo, un ciudadano de nacionalidad española, natural y vecino de Melilla, que finalmente ha reconocido haber comprado la mercancía y ser su destinatario. Ha pasado a disposición judicial como supuesto autor de un delito contra la salud pública, junto con los medicamentos intervenidos.
Efectos graves para la salud
Según la Guardia Civil, el mal uso de este tipo de medicamentos, cuyo principio es la benzodiacepina, se puede asociar a conductas adictivas, con efectos secundarios graves para la salud del consumidor, teniendo efectos adversos que afectan principalmente al sistema nervioso.
Algunas de las reacciones adversas más características son la somnolencia, confusión y ataxia.
Los medicamentos aprehendidos en esta actuación tienen entre sus ingredientes sustancias farmacológicamente activas, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 2 a., del texto refundido de la Ley de garantías y uso racional de medicamentos y productos sanitarios aprobado por el Real Decreto Legislativo 1/2015 de 24 de julio
Únicamente deben suministrarse con prescripción facultativa y, además, al tratarse de principios psicotrópicos, su prescripción y dispensación precisa de un especial control para evitar riesgos para la salud.
