En 1997 la administración local logró ingresar 5.700 millones de pesetas en concepto de aforos, una cantidad que se calificó en su día de récord histórico y que posibilitó reunir un superávit de 2.000 millones de pesetas. Para el 98, sin embargo esa cifra se quedaba pequeña. Según constaba en el capítulo de ingresos que manejaba el gobierno Palacios, en el 98 se iban a recaudar 6.900 millones, lo que suponía un incremento respecto al año anterior que los populares consideraban ficticio por no existir un criterio serio que avalara el aumento de las importaciones. Ignacio Velázquez, presidente regional del PP consideraba que las previsiones de Palacios no respondían a una realidad palpable, sino a la necesidad de contentar a los partidos que hacían posible el Ejecutivo. En 1997 la administración local logró ingresar 5.700 millones de pesetas en concepto de aforos, una cantidad que se calificó en su día de récord histórico y que posibilitó reunir un superávit de 2.000 millones de pesetas. Para el 98, sin embargo esa cifra se quedaba pequeña. Según constaba en el capítulo de ingresos que manejaba el gobierno Palacios, en el 98 se iban a recaudar 6.900 millones, lo que suponía un incremento respecto al año anterior que los populares consideraban ficticio por no existir un criterio serio que avalara el aumento de las importaciones. Ignacio Velázquez, presidente regional del PP consideraba que las previsiones de Palacios no respondían a una realidad palpable, sino a la necesidad de contentar a los partidos que hacían posible el Ejecutivo.
