En octubre de 2016, una menor de 16 años de edad fue asaltada a punta de navaja en la calle Explanada de Camellos, frente al Estadio Álvarez Claro. Pese a que la joven señaló al acusado en el reconocimiento fotográfico, no se ratificó en dicho reconocimiento durante el juicio. La Fiscalía pide para el acusado 4 años de prisión. El 23 de octubre de 2016, sobre las doce y media del mediodía, la víctima (quien por entonces contaba con tan sólo 16 años), iba caminando por la calle Explanada de Camellos, frente al Estadio de Fútbol Álvarez Claro, cuando fue asaltada por un individuo que la sorprendió por detrás, amenazándola con una navaja que llegó a apuntar contra su costado.
El individuo, supuestamente el acusado, se llevó el bolso y el móvil de la joven. Las investigaciones policiales condujeron a la realización de un reconocimiento fotográfico tres meses después, en febrero de 2017, en el que la joven señaló al actual acusado como posible autor de los hechos.
Sin embargo, la menor, que declaró presencialmente pese a las reticencias de su madre -por un error del juzgado-, no se ratificó en el reconocimiento practicado más de un año atrás; la joven declaró que el individuo que la asaltó iba encapuchado y sólo pudo llegar a ver que “era muy moreno”.
El acusado, por su parte, negó su participación en los hechos afirmando que suele pasar los domingos en Marruecos, y que volvía a Melilla de noche, ya que trabaja al día siguiente.
El Ministerio Fiscal interesó para el acusado la imposición de una pena de 4 años de prisión por un delito de robo con violencia o intimidación.
La defensa, por su parte, achacó la acusación a “un grave error de identificación” por parte de la Policía, y pidió la libre absolución del acusado al entender que no se había presentado ninguna prueba de cargo y que, por tanto, no quedaba acreditada su participación en los hechos.
