Un ciudadano marroquí ha sido condenado a 6 meses de prisión por proferir, a lo largo del mes de abril de 2016, amenazas e insultos contra la que fuera su mujer, también marroquí. El hombre llegó a amenazarla de muerte y la llamó “judía”, “cara de sapo” y “cara de mono”, todo ello a raíz de la interposición de una demanda de divorcio por parte de la perjudicada. El hombre, en aras de conseguir una rebaja por parte del Ministerio Público, reconoció los hechos y fue condenado a 6 meses de prisión, 3 años de alejamiento y 600 euros de multa por un delito de amenazas, además de 150 euros de multa por otro delito de injurias. A lo largo del mes de abril de 2018, a raíz de la interposición de una demanda de divorcio, el acusado, un ciudadano marroquí residente en nuestra ciudad, envió mensajes amenazantes e insultos por Whatsapp de manera continua e insistente a la que por entonces era su mujer, también ciudadana marroquí con residencia. El acusado, que carece de antecedentes penales en nuestro país, llegó a amenazar de muerte a su mujer, a la que llamaba «cara de mono», «cara de sapo» o «judía», entre otros calificativos; de entre las amenazas, destacan las dirigidas tanto a ella «renuncia (al divorcio) o muerte»; «voy a acabar contigo»; como a los hijos que ambos tienen en común, «te voy a quitar los niños y no vas a poder hacer nada».
En un principio, tanto el Ministerio Fiscal como la acusación particular (en representación de la perjudicada) interesaban para el acusado la imposición de una pena de un año de prisión y 5 años de alejamiento por un delito de amenazas, si bien el reconocimiento pleno por parte del acusado de los hechos delictivos que se le imputaban suscitó un acuerdo de conformidad entre las acusaciones y la defensa, rebajándose la petición inicial de pena a tan sólo 6 meses de prisión y 3 años de alejamiento más 600 euros de multa por un delito de amenazas y 150 euros de multa por un delito de injurias.
Debido a que el acusado carece de antecedentes, el juez acordó la suspensión de su entrada en prisión condicionada a que no cometiera ningún delito durante un plazo de 5 años y a que abonara los 600 euros de multa por las amenazas, de lo contrario, se revocará la suspensión e ingresará en prisión.
