No sé porque, pero sentado en la terraza del Café California Park (parque) mirando a lontananza hacia la impresionante Araucaria camino (mi vista) de Carlos de Arellano, extasiado yo, admiraba su frondosa arboleda de mil verdes y brillos diferentes; ido mi pensamiento a la espesura invisible del mismo, me recreo en semejante naturaleza sin mezcla de mal de alguno que, enturbie mis pensares cuando descansados relajan mi respuesta a tanto majadero de la letra, si lo más contundente sería ponerme a su altura, y no, quiero ser decente una vez más, sin disimulos ideológicos o políticos, más bien que sean naturales y ecológicos Y que no alteren la simbiosis humano-naturaleza que, tanta falta hace. Por eso, solo por eso, no he ocultado mis ideas ni mis hechos, ni los voy descubriendo poco a poco, a mí o me hace falta sacar una foto personal demostrando un cierto hacer juvenil camino del nacional catolicismo, incluida la hornacina ante la cual todas las mañanas se santiguaba para que le librasen de "meter la pata", hoy parece ser que ya no lo hace, el persignarse.
Es curioso que el que sí parece hacerlo es Pedro Sánchez, va cauto y astuto, cediendo lo justo a las tramoyas separatista, esperemos siga siendo este su camino y corrija al otro castellano parlante de Zapatero. Loado sería el Señor… Amén. El apoyo a Morenés es apoyar la ecología ante las malas hierbas. De ahí que lo compare con lo natural, y lo natural es ir extirpando del suelo esas malas hierbas sin dar tiempo a que sus simientes puedan dar, después de cuarenta años, otros enraizamientos alocados y engreídos que extorsionen la naturaleza benigna de una España global, al alcance de todos. Claro que para ello haya que equilibrar la riqueza que los egoístas quieren para ellos solos, y eso no puede ser, por mucho que muevan la aguja de marear. Unos dan una cosa y otros otra, como intercambio razonado.
Esto es como con la letra, así y como demarres, así serás catalogado, por lo que prefiero ser cursi y fissssnolissss ante que basto e hipócrita y darme un tortazo. Y las "castas" no perdonan.
