El registro de los “ministros de culto” en el Registro de Entidades Religiosas, a efectos de reconocimiento civil de los mismos, ha sido paralizado por la CIM tras conocerse que dicho trámite ha suscitado la “preocupación” del Ministerio de Asuntos Islámicos de Marruecos. Desde la CIM piden a ambos gobiernos que hablen para no tener más limitaciones. En cumplimiento del Real Decreto 594/2015, de 3 de julio, por el que se regula el Registro de Entidades Religiosas que, entre otros aspectos, atiende a necesidades de las propias entidades, concretamente al papel de los imames que, como “ministros de culto”, no tienen más reconocimiento que a efectos de documentación y padrón, por lo que solo figuran en registros de la policía y del ayuntamiento, administraciones que carecen de competencia en materia religiosa y sin más efecto jurídico, la Comisión Islámica de Melilla ha iniciado el correspondiente trámite para la anotación de los imames como “ministros de culto”, en base al artículo 18 del mencionado Real Decreto, que establece que “las entidades religiosas inscritas podrán anotar en el Registro de Entidades Religiosas a sus ministros de culto que ostenten residencia legal en España”.
Desde la CIM insisten en la importancia de esta anotación, que califican de imprescindible para que los imames puedan ser habilitados para realizar actos religiosos con efectos civiles.
“Al parecer, dicho intento de anotación ha generado cierta preocupación en la Delegación de Asuntos Islámicos del Ministerio de Habous y Asuntos Islámicos en Nador, lo que ha motivado que los imames de nuestra ciudad hayan recibido instrucciones para que renuncien a su anotación en dicho registro”, informa Mohamed Ahmed Moh, también conocido como Yimmy.
Es por ello que, hasta que el Ministerio de Justicia del Gobierno de España, así como el Ministerio de Habous y Asuntos Islámicos del Reino de Marruecos, no establezcan y definan el papel y las funciones del personal religioso, así como esclarezcan las competencias que tengan o pudieran tener las administraciones, la CIM anuncia la paralización del trámite para la anotación del personal religioso en el Registro de Entidades religiosas, así como cualquier iniciativa relacionada con los imames de la ciudad.
Desde la entidad ruegan al Gobierno español que establezca las conversaciones que sean necesarias con sus homólogos marroquíes para que las entidades religiosas puedan realizar sus funciones sin más limitaciones que las propiamente impuestas por nuestro ordenamiento jurídico, para así evitar las injerencias en asuntos religiosos.
