Las playas de Melilla estarán más seguras gracias a la presencia de agentes de la Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil, que se repartirán la tarea de vigilancia a lo largo del litoral melillense.
Según informó ayer el consejero de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, en una entrevista concedida a la Cadena Cope, esta decisión fue adoptada en la última reunión de la Junta Local de Seguridad.
Se repite así una medida adoptada el año pasado para elevar las cuotas de seguridad en uno de los puntos más concurridos durante el verano en nuestra ciudad.
Para ello, la Guardia Civil se hará cargo de la vigilancia y la seguridad en las playas de Horcas Coloradas, Aguadú y Alcazaba. La Policía Local hará lo propio en las playas de San Lorenzo y Galápagos, mientras la Policía Nacional actuará en las playas de los Cárabos y La Hípica, según indicó el consejero.
