El choque, tras el paso por los vestuarios, se igualaría más, con intercambio de canastas y con mínimas diferencias a favor de uno u otro. Así, al final del tercer cuarto se llegó con empate a 57. En el último periodo, España se mostró superior y consiguió abrir una pequeña brecha de puntos que ya le resultó suficiente para apuntarse un nuevo triunfo. La Selección Española se proclamó ayer campeona del Torneo Pre-Europeo U18, tras derrotar a una combativa Turquía por el resultado de 75-66.
Los turcos comenzaron dominando en el primer cuarto, llegando a gozar de una máxima diferencia de nueve puntos (13-22), lo que provocó que Joaquín Prado solicitara un tiempo muerto. Este parón pareció dar sus frutos, porque, y merced a un parcial de 5-1, lograron reducir las distancias al término de este periodo (18-23).
En el segundo asalto, los hispanos apretaron en defensa, consiguiendo que los otomanos se mantuvieran más de tres minutos sin anotar, lo que aprovecharon los españoles para firmar un 11-0 de salida y colocarse con seis puntos de renta (29-23). A partir de ese momento los que se atascaron en ataque fueron los anfitriones, que al intermedio se marcharían ocho puntos abajo (35-43), después de encajar un contundente 6-20.
El choque, tras el paso por los vestuarios, se igualaría más, con intercambio de canastas y con mínimas diferencias a favor de uno u otro. Así, al final del tercer cuarto se llegó con empate a 57. En el último periodo, España se mostró superior y consiguió abrir una pequeña brecha de puntos que ya le resultó suficiente para apuntarse un nuevo triunfo. Al final, los de Joaquín Prado vencerían por 75-66.
