Algunos clubes melillenses de categoría nacional han puesto ya sus proyectos deportivos en marcha, como ha sido el caso de la U.D. Melilla y del River Melilla C.F., representantes locales en laSegunda B y en la Tercera División, respectivamente, a los que se unirán en los próximos días los conjuntos juveniles del Rusadir Melilla y del Torreblanca Melilla, militantes en la División de Honor y en la Liga Nacional.
En lo que respecta al decano del deporte local, la U.D. Melilla, echó a andar el pasado martes, con un plantel que la próxima temporada será dirigido por Luis Miguel Carrión, ex jugador unionista en la campaña 2008-09. El catalán tendrán el difícil reto de intentar meter a la Unión Deportiva en zona de Play-Off al final del campeonato 2018-19, después de que el club que preside Luis Manuel Rincón se quedara con la miel en los labios en las dos últimas temporadas.
El Melilla lleva un ritmo frenético en cuanto a fichajes y presentaciones de jugadores, haciendo ilusionar a la afición tras la decepción de los dos últimos cursos. La ilusión es por tanto máxima y se comenta que se está confeccionando un gran equipo, aunque como bien decía un gran entrenador del Melilla, Álvaro Rodríguez Ros, 'Alvarito' -q.e.p.- "no hay que lanzar las campanas al vuelo, pues es a partir de las décima jornada cuando se pueda comenzar a medir el potencial de los equipos, ya sea por arriba como por abajo". De momento, la planificación del trabajo va por buen camino y esperamos que por fin se consiga, a la conclusión de la temporada próxima, los éxitos esperados.
En otro orden de aspectos, también trabaja con ilusiones renovadas el C.D. Melilla Virgen de la Victoria de balonmano, que recupera su anterior denominación en la Primera División Estatal, en lugar del C.D. Gimnástico Melilla. Será su tercer año consecutivo en categoría nacional y de nuevo el club ha vuelto a apostar, de forma muy acertada, por un hombre de la casa, joven y de contrastada valía para intentar aspirar a algo más que la permanencia.
Faisal Salmi ha llegado a afirmar que ha renovado por la entidad que preside Nasser Bagdad porque se va a confeccionar un equipo competitivo y está convencido que si se arma un buen plantel puede conseguir grandes cosas para el balonmano melillense. Ilusión, ganas, trabajo y buen hacer en su cometido no le faltan a este gran técnico de la casa.
