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Los efectos ya se empiezan a notar

Esto no ha hecho más que comenzar porque los inmigrantes ya saben que España es la puerta más fácil de acceder a Europa después de las controvertidas decisiones de Pedro Sánchez
La nueva política migratoria del gobierno surgido tras la moción de censura que apoyaron PSOE, Podemos, separatistas y filoetarras, presidido por Pedro Sánchez, está teniendo sus efectos. Melilla puede ser una de las más perjudicadas si sigue el ritmo actual de llegadas tras la decisión del flamante Ejecutivo de acoger al barco Aquarius cuando se hallaba frente a las costas de Italia y Malta y estos dos países se negaban a hacerlo o su anuncio de que retirarán las concertinas de las vallas de Ceuta y Melilla. También su polémico anuncio de que la Guardia Civil no podrá hacer uso de material antidisturbios, con lo que los agentes se verán atados de mano y pies para poder repeler cualquier avalancha en la alambrada. A todo ello hay que unir también el deseo socialista de derogar la actual ley de Seguridad Ciudadana, que permitía los "rechazos en frontera", lo que otros llaman "devoluciones en caliente".

No es de extrañar por tanto que según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) actualizados este viernes 10 de agosto, un total de 24.634 migrantes hayan llegado a España por la ruta occidental del Mediterráneo en lo que va de año, frente a las 10.880 que lo hicieron de enero a agosto de 2017. Así, la cifra de llegadas ha experimentado en 2018 un aumento del 126,4% con respecto al mismo periodo del año pasado, al haber entrado a España unas 14.000 personas más.

Las más de 24.500 llegadas a España por mar en lo que va de año supera incluso la de todo el año 2017, cuando llegaron 22.108 migrantes por esa ruta. Así pues, en 2018 ya han entrado a España por esa vía marítima 2.526 personas más de las que lo hicieron durante todo el año pasado.

Según estos datos de la OIM, al menos 308 personas han fallecido o desaparecido en esta ruta del Mediterráneo intentando alcanzar España, frente a las 126 muertes que se contabilizaron en el mismo periodo de 2017. De hecho, la cifra de fallecidos en lo que va de año supera también la cifra total del año pasado, que cerró con 224.

El número de muertes en todas las vías del Mediterráneo para alcanzar Europa asciende a 1.524, frente a las 2.428 que se produjeron en este periodo del año pasado. Las llegadas por mar en lo que va de 2018 contabilizadas por la OIM son 60.309, mientras que en 2017 por esas fechas ya habían entrado más de 125.000 personas.

Por su parte, los datos del Ministerio del Interior actualizados a 31 de julio apuntan que los migrantes llegados por vía terrestre a España en 2018 son casi 4.000, un 16,2% más que hasta el 31 de julio de 2017. Por Ceuta se han registrado 1.223 entradas en este periodo, mientras que por Melilla han sido 2.736.

Pero esto no ha hecho más que comenzar porque los inmigrantes ya saben que España es la puerta más fácil de acceder a Europa después de las controvertidas decisiones del gabinete Sánchez en sus dos primeros meses de Gobierno.

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