El Tren de la Historia, de esta forma podríamos titular al trenecito que tenemos en Melilla para darnos un paseo por la ciudad contemplando la historia viva de una ciudad española moderna y adelantada a su tiempo como es Melilla.
El recorrido puede parecer corto "posiblemente", pero con sustancia de vida presente, futura y cronológica.
Su salida en dirección a Melilla la Vieja, marca un camino de historia y vivencias compartidas. Unos 47 socios de la AV. Tesorillo, entre mujeres hombres y niños, tuvieron la suerte de montarse en el trenecillo el pasado día 8 de agosto de este año de 2018.
El itinerario a la ciudadela está lleno de grandes acontecimientos, eventos y sitio; cada bloque que sujeta las murallas tiene su propio testimonio, guardado celosamente para contárselo al que quiere escuchar cómo surge un pueblo.
Una vez realizada la ruta de la villa, ya tenían preparado el desayuno para sus viajeros en la "Casa Chico". Nunca me aprendí el nombre comercial, si es que tenia o tiene alguno, siempre digo… "vamos al Chico a tomar una cervecita"
Finalizada las viandas allí colocadas los comensales se subieron al tren y emprendieron la marcha de nuevo a seguir el recorrido histórico, su bajada de la antigua Melilla fue encaminada o mejor diremos motorizada para darle la vuelta a la Plaza de España y subir por la calle del General Marina, Plaza de Torres Quevedo, Avda. de Reyes Católicos y a la arteria principal de Melilla, Avda. de Juan Carlos I Rey.
Si Melilla la Vieja reboza historia en cada piedra, teja o puerta de los edificios, no es menos la nueva, moderna y muy caritativa ciudad de Melilla.
Sus edificios modernistas respiran el señorío, la modernidad y la sobriedad de una ciudad forjada por hombre y mujeres a golpe de historia.
Muy divertido y relevante culturalmente lo estaban pasando los socios y simpatizantes de la AV. Tesorillo con el paseo, pues aunque muchos conocen, y muy bien la historia de Melilla, los abuelos/as se las iban explicando a sus nietos.
El recorrido siguió hasta encarar el Paseo Marítimo Francisco Mir Berlanga (un buen Alcalde Melillense, de su época)
Si el recorrido por la historia modernista de la ciudad fue espléndida, nada que objetar con la Melilla del siglo XXI, con sus extraordinarios edificios modernos y alineados junto a sus playas de calidad y finura. Solo tenemos que cerrar los ojos un momento y abrirlos de nuevo para darnos cuenta que estamos en cualquier ciudad costera de la Península Ibérica, Marbella, Valencia, Barcelona… cualquier lugar se confundiría con la visión de este rincón español.
Se lo pasaron bien y con ganas de repetir, los comentarios no se hicieron esperar y la gente agradecía la labor que realiza la Viceconsejera del Mayor y Relaciones Vecinales Dña. Carmen Pilar San Martín Muñoz, en este campo del mayor y con las asociaciones de vecinos, pues siempre está dispuesta a escuchar y a resolver todo lo que se le pide y está en su mano hacerlo.
El Tren de la Historia, ha hecho nuevamente feliz, esta vez, a 47 melillenses y debemos agradecer también al Viceconsejero de Turismo Don Fº Javier Mateo su acierto en traer, en su día, este medio de locomoción para el deleite de todos los melillenses y de las personas que nos visitan de cualquier punto del mundo.
