El portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, ha ofrecido al Gobierno central un acuerdo con el PP para "definir una política de inmigración seria, responsable y coherente", porque, a su juicio, "lo que se ha visto hasta ahora es una absoluta improvisación" y un "error tras error en una cuestión tan sensible". Así lo ha manifestado en declaraciones a los medios antes de participar en Valencia en una reunión de trabajo con la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, y senadores valencianos, preguntado por su valoración sobre la petición de que los inmigrantes que viajaban en el buque 'Open Arms', que este pasado jueves desembarcaron en Algeciras (Cádiz), tengan las "mismas ayudas" que los que llegaron a Valencia con el Aquarius. Cosidó, que fue director de la Policía con Jorge Fernández Díaz en Interior, ha aseverado que "es difícil hacer peor las cosas que como las está haciendo el Gobierno en materia de inmigración", ya que el Ejecutivo central lleva a cabo una "política inconsistente". "Igual recibimos un barco con fiestas y tambores en el puerto de Valencia, que recibimos un barco en Andalucía a escondidas para que los inmigrantes supuestamente ingresen en un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) en condiciones totalmente distintas", ha reprobado.
A su juicio, en "cuestiones tan trascendentes y tan graves como una crisis migratoria que afecta al conjunto Europa, lo mínimo que se puede pedir es un poquito de seriedad y coherencia".
En ese sentido, ha pedido la comparecencia del presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, para explicar sus "políticas absolutamente contradictorias" y por qué "no se están coordinando en absoluto con las Comunidades Autónomas".
Efecto llamada
Por su parte, el exministro del Interior Juan Ignacio Zoido ha negado "falta de previsión" por parte del anterior Ejecutivo de Mariano Rajoy en política migratoria y ha afirmado que el incremento de las llegadas a las costas españolas se debe al "efecto llamada" que, a su juicio, ha causado el nuevo Ejecutivo por acoger a los 629 migrantes del Aquarius.
"El problema que se ha suscitado en los últimos dos meses en España con la inmigración tiene un nombre, y el nombre es Pedro Sánchez y la frivolidad con la que ha tratado al Aquarius", ha manifestado Zoido en una entrevista en La Sexta recogida por Europa Press, preguntado por el repunte en las llegadas de migrantes y por la decisión de acoger a los más de 600 inmigrantes y refugiados que, tras ser rescatados en aguas del Mediterráneo, desembarcaron en el puerto de Valencia el 17 de junio.
"Los únicos responsables del incremento (de llegadas) no es la falta de previsión, es que ha habido una avalancha fruto de ese efecto llamada", ha aseverado el exministro tras las acusaciones del actual Gobierno de "falta de previsión" por parte de la administración anterior en esta materia. Asimismo, ha recomendado al actual responsable de Interior, Fernando Grande-Marlaska, que "no improvise" en ese asunto.
"Cuida a Marruecos"
Zoido ha apuntado que Pedro Sánchez acogió a los migrantes del buque de rescate "con una gran expectación", "muchos fotógrafos" y con "bombo y platillo", provocando así un "efecto llamada". Según ha recalcado, esta política solo beneficia "a las redes ilegales" que "están siendo capaces de captar más voluntades para que quieran" irse a España y atraviesen el Mediterráneo en "ataúdes flotantes".
En este sentido, ha pedido a Grande-Marlaska "que cuide mucho a Marruecos" que es "un país aliado", al tiempo que le ha aconsejado que viaje a los países de origen para constatar que "cualquier gesto del Gobierno produce un efecto llamada".
"Los que desde El Sahel quieren llegar a Europa y quieren atravesar todo el norte de África buscarán una serie de salidas a través de Marruecos que le van a permitir llegar antes, y con ese efecto llamada lo que estamos es alimentando que algunas rutas ya cerradas hayan vuelto a abrirse", ha sentenciado.
"Lo único que le pido al señor Sánchez es que no frivolice con un tema tan importante con la inmigración", ha subrayado, afeando al líder del Ejecutivo que él "no tiene el patrimonio de la defensa" a esos migrantes que solo buscan "una vida mejor".
