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Eliminan tres cruces en la calle Mar Chica, que ya tiene paseo con prioridad peatonal

Cruce eliminado en la confluencia de las calles Mar Chica y Valencia

El escenario del tráfico rodado ha cambiado en la calle Mar Chica, donde se han eliminado la mitad de los cruces para ir de norte a sur y viceversa, gracias a la obra que ha llevado a cabo la Consejería de Fomento en el último mes y medio con una inversión de 228.000 euros. Una actuación que acaba de terminar y que, además de renovar todo el asfalto de esta calle, una de las más importantes del Barrio del Real, también ha dado prioridad a los peatones sobre los coches a lo largo de todo su paseo central.

Para conseguirlo, la Consejería de Fomento ha construido pasos de cebra elevados que atraviesan los tres únicos cruces que se han mantenido para ir de norte a sur o viceversa en la confluencia de Mar Chica con las calles Aragón, Cataluña y Andalucía.
Esta solución, además, permite que el paseo central sea totalmente accesible para los peatones desde la calle General Villalba hasta la calle Gurugú, que suponen el principio y el final de la calle Mar Chica, y que también permiten ir desde el Real hasta el Polígono Industrial Sepes o viceversa.

Los cruces que se mantienen y los que se eliminan
Los cruces de Mar Chica con Aragón, Cataluña y Andalucía son los tres únicos puntos en los que, a partir de ahora, se puede atravesar la calle para ir desde el Real hacia el Sepes, desde el polígono industrial en dirección a calle La Legión, o simplemente hacer un cambio de sentido.
En la confluencia con la calle Aragón, además, se ha habilitado un pequeño espacio de paseo, a modo de rotonda como los que ya hay en los cruces de Cataluña y Andalucía, poniendo fin a un cruce demasiado amplio que tradicionalmente ha sido un punto negro de accidentes.
Además de esos tres cruces, también se ha mantenido otro en la confluencia de Mar Chica con la calle Castilla, pero solo en dirección hacia calle La Legión. Para ir desde calle Castilla hacia el Sepes, los conductores se encuentran con que el carril que antes les permitía seguir recto ahora ya no existe porque se ha integrado con el paseo central y se han habilitado plazas de aparcamiento a ambos lados. Por lo tanto, para ir hacia el Sepes, se ven obligados a girar a la derecha y seguir la calle Mar Chica hasta el cruce con calle Aragón, donde ya pueden girar a la izquierda.
Cegar el carril transversal con la continuidad del paseo central y habilitar aparcamientos a ambos lados es la misma solución que se ha dado en los otros tres cruces que han sido eliminados en la confluencia de la calle Mar Chica con Capitán Arenas, Coronel Cebollino y Valencia. En este último cruce es donde más se ha notado el cambio, ya que donde antes había un espacio siempre ocupado por los coches estacionados en batería y la doble fila, ahora es una continuidad del paseo central para los peatones con sus estacionamientos en línea, al igual que en toda la calle Mar Chica.

Puntos negros
Los vecinos lo celebran. Algunos de ellos han recordado en declaraciones a este Diario que llevaban ya mucho tiempo quejándose del punto negro que suponía este cruce por el desorden de coches, que formaban un peligroso embudo en el que los conductores no tenían ninguna visibilidad a la hora de ceder el paso.

La única pega: los pasos de peatones elevados ‘obligan’ a infringir la norma

Los vecinos solo ponen una pega, y es que con los pasos de peatones elevados que permiten una continuidad en el paseo central en los cruces con la calle Aragón, Cataluña y Andalucía, los conductores se ven obligados a parar encima, lo cual está prohibido por el artículo 94 del Reglamento de Circulación, para ceder el paso a los vehículos que le vienen por la derecha en la calle Mar Chica.
“Nos obligan a infringir la norma sí o sí porque es imposible que veamos si viene alguno antes de meternos en el paso de peatones”, señala un vecino, aunque también apunta, con cierta sorna: “Ya sería mala suerte que nos multaran por eso, con la cantidad de infracciones sin castigar que vemos a diario en Melilla”.

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Redacción

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