Los test físicos coparon ayer la mayoría del tiempo en este primer día de pretemporada para los de Alejandro Alcoba. Hoy, el equipo melillense afrontará su segunda jornada de trabajo con una nueva doble sesión en el Pabellón Javier Imbroda.
El nuevo proyecto del Melilla Baloncesto daba en la mañana de ayer sus primeros pasos con la sesión inaugural de esta pretemporada, que consistió en unos test físicos en los que participaron los jugadores de la plantilla que se encuentran en nuestra ciudad, más el vinculado de este curso al CAM Enrique Soler, el lituano Erikas Kalinicenko.
Antes de comenzar con el trabajo sobre la cancha, que arrancó a las 10’00 horas y en las instalaciones del ‘Javier Imbroda’, los jugadores acudieron al Laboratorio Lamas, donde se sometieron a unos análisis de sangre, unas pruebas que se complementarán estos próximos días con más test.
En cuanto al trabajo propiamente dicho, los jugadores se dividieron en dos grupos. Así, uno de los mismos se marcharon hasta la sala de fisioterapia, donde el fisioterapeuta azulón, Alejandro Ríos, llevó a cabo a los suyos un control de peso, pliegues y pruebas de movilidad articular. El otro grupo puso rumbo a la cancha de juego para realizar diferentes ejercicios de valoración morfofuncional junto al preparador físico, Álvaro de Pedro. Posteriormente, los dos grupos cambiaron de ubicación para completar la parte de estos test físicos que les restaban.
Por la tarde, el equipo volvió a las instalaciones del ‘Javier Imbroda’ para continuar con el trabajo programado para este primer día de pretemporada. Esta sesión estuvo ya dirigida íntegramente por el primer entrenador del decano, Alejandro Alcoba, y en la que se intercalaron ejercicios de tecnificación con nuevas pruebas físicas.
