La Unión Deportiva Melilla salió ayer por la noche en barco rumbo a la provincia de Cádiz, donde mañana afronta su primera salida liguera del año, pero antes de preparar los bártulos para el viaje, el entrenador azulino pasó por la sala de prensa para atender a los medios en la previa del choque. El técnico barcelonés catalogó la semana de trabajo como «buena», explicando que están trabajando en la manera de «hacer daño» al C.D. San Fernando. Apuntó que su plantel va a enfrentarse a «un buen rival que viene de conseguir tres puntos fueras y que no va a poner las cosas fáciles».
En cuanto al posible estado del verde del Municipal de Chiclana -donde va a disputarse el encuentro-, Carrión afirma que le importa bien poco, que quiere «a un equipo que empiece los partidos sin que le influya nada, ni el campo ni el tiempo».
«Existen mil tópicos -explica-, como el de que el campo estará igual para los dos equipos, pero es la realidad. Los campos de la provincia de Cádiz suelen estar bien cuidados porque muchos clubes hacen la pretemporada allí, pero este no sé como anda. Igualmente, nosotros tenemos que hacer las cosas bien esté como esté el terreno de juego, lo que realmente me preocupa es cómo hacerle daño al San Fernando.
Acerca de su próximo rival, Luis Miguel Carrión ha destacado a su entrenador, Pérez Herrera, «un míster que trabaja muy bien» y que ha conseguido armar un bloque «muy potente con gente poderosa por arriba». Reconoce que será un enfrentamiento complicado, pero intentará sacar el máximo provecho a los posibles errores que ha observado en los vídeos del plantel isleño. «Intentaremos que el partido sea como nosotros prevemos, pero para eso tenemos que incidir en todo lo trabajado esta semana», ha señalado.
Preguntado Carrión por si ha preparado el duelo haciendo caso al partido de Copa del próximo miércoles, asegura que «para nada». «He visto algunas cosas -admite- pero no he pensado mucho en dicho encuentro. Lo único importante para mí ahora es el choque del domingo, competir bien, mantener la portería a cero y seguir creando ocasiones… lo del miércoles ya lo veremos».
No ha querido desvelar -no es habitual en él- el once que dispondrá el domingo sobre el césped chiclanero, pero admite tener dudas al respecto, ya que «lo hicieron bien tanto los que salieron de inicio como los que entraron después y ha habido una buena competitividad en los entrenos». El catalán, que apunta que «cada partido tiene su historia», ya se había definido como un entrenador «no de onces tipo».
Y es que el entrenador quiere «que todos lo den todo, que el jugador que salga esté preparado para dar el máximo». Comenta que «todos los que han venido son buenos y cualquiera puede jugar».
