“Desde el banquillo creo que mi jugador toca el balón con la mano, pero ya si es voluntaria o involuntariamente se me escapa, al final el árbitro es el que decide”. El entrenador de la U.D. Melilla, Luis Miguel Carrión, valoró de la siguiente manera el triunfo por la mínima de los suyos ante el Talavera: “Nos costó entrar en el choque en los primeros minutos, luego comenzamos a sentirnos más cómodos. En el primer acto causamos problemas a nuestro rival por las bandas con nuestros laterales y extremos, y, sobre todo, en la estrategia. Fue una buena primera parte”, explicó tras el duelo.
“Tras el descanso -prosiguió- y con su cambio de sistema conseguimos aguantar y sufrir bien atrás, incluso pudimos irnos con más ventaja en el marcador si Óscar hubiera acertado su ocasión clara. Al final, todo se resume en aciertos y errores, pasamos de una ocasión clara de ellos al 0-1 a nuestro favor y luego defendimos muy bien”, dijo el técnico del equipo melillense.
