Mohamed Mahanan Mohamed celebró de la mejora manera posible sus 350 partidos como jugador de la U.D. Melilla con una gran victoria ante la Real Balompédica Linense, que consolida al decano del Grupo IV de la Segunda B como líder por tercera semana consecutiva. El central melillense se mostró «muy contento» por este importante registro a sus 35 años de edad y en sus catorce temporadas con la primera plantilla del equipo de su tierra, mientras que por lo que respecta al liderato dijo que «ya hay que olvidarse y pensar en el trabajo día a día», con la mente puesta solamente en el encuentro ante el Recreativo de Granada.
El defensa central del Melilla reconoció que jugar 350 partidos con el Melilla «es una cifra importante», aunque cuando uno juega al fútbol «en lo que menos piensa es en esos datos, ya que vas sumando partidos y al final te pones en esas cifras». No obstante, «estoy muy contento con el número de partidos que llevo cumplidos con el equipo y espero que sean más».
Sus inicios
Mahanan, en una entrevista concedida a la página web del club unionista, analizó su trayectoria como futbolista del decano del Grupo IV, y recuerda que la primera vez que subió a entrenar al primer equipo fue gracias al ex cancerbero, ex entrenador y ex secretario técnico de la U.D. Melilla, José Luis Montes, que en paz descanse. «Estaba entrenando en el equipo de Tercera División y me subió José Luis Montes, si no recuerdo mal. A partir de ahí he ido sumando día a día, trabajando sin pensar en lo que pudiera ocurrir más adelante. Gracias a Dios aquí sigo, rindiendo y dándolo todo por este equipo».
A continuación fue cuestionado sobre las diferencias de aquel Mahanan joven y del actual capitán, ya más maduro después de estos catorce años. «Tengo que decir que siempre he tenido la suerte de estar rodeado por jugadores que me han ayudado, como Balbuena, Iñigo Ros, Amarito, Chota…, gente que te quiere ayudar y te enseña el camino. Poco a poco vas cogiendo de todos y vas amoldándote a lo que requiere la situación».
Por otro lado, indicó que en todos estos años ha aprendido bastante de los malos momentos momentos. «Está claro que en los buenos momentos, el equipo va solo, pero yo he podido vivir aquí situaciones de todo tipo, en las que estábamos arriba jugando Play-Off, pero también otras en las que andábamos con la soga al cuello y teníamos que sacar la situación como fuese. Sinceramente, creo que es en esos momentos cuando te das cuenta que tienes que darlo todo para salir adelante».
Liderato
Y con respecto al presente curso, con el Melilla como líder, dijo que hay que centrarse en trabajar, sin pensar en la clasificación. «Ahora tenemos que vivir el momento. Llevamos 13 puntos de 15 posibles y nada más. Nos tenemos que olvidar de la clasificación y de lo que pueda pasar al final, empezando desde hoy mismo con el trabajo. El domingo pudimos sacar adelante el encuentro, pero desde el lunes pensamos en el siguiente. Tenemos que afrontar bien el día a día e ir sacando partidos, no conozco otra fórmula. Si nos confiamos y nos dejamos llevar por nuestros egos, por las noticias de la prensa o por la propia clasificación nos estaremos equivocando. No llegaríamos a ningún puerto».
No obstante, destacó la solidez y ambición del Melilla para vencer a un rival complicado. «La Balona es uno de los mejores planteles que han pasado por aquí, si no el mejor. Supo jugarnos, nos cerró el camino por dentro y, a raíz de ahí, nos sentimos incómodos en muchas fases del encuentro. Aún así fuimos capaces de leer bien el partido, contrarrestar su juego y, a partir del minuto 70, marcar nuestros goles y cerrar el choque. Este es el camino, saber jugar todo tipo de partidos y sacarlos sea como sea adelante».
«La temporada pasada empezamos bien, pero pronto vinieron las dudas y fuimos un poquito irregulares, por lo que al final acabamos echando de menos ciertos puntos del campeonato. No queremos volver a quedarnos a un punto ni cometer los mismos errores. Nos hemos metido en la cabeza este año ir partido a partido y ganar todo lo que se pueda», resaltó el capitán de la U.D. Melilla, que a nivel individual se ve bastante bien y con la confianza del entrenador. «Como he dicho antes, sigo trabajando día a día, esforzándome al máximo en los entrenamientos y, a raíz de ello, el míster está confiando en mí. Intentaré seguir dando todo por el equipo, sumando mi granito de arena, porque no queda otra».
Por otro lado, indicó que no se ve presionado en la posición de central, pero sí que dijo que hay una gran competitividad entre todos sus compañeros. «Más que presión veo una competitividad sana. El vestuario es una gran piña y todo el mundo anima. De hecho, el mismo domingo, Paco Aguza y Sofian Chakla animaban como los que más, pues juegue quien juegue todos estamos agarrados a la misma cuerda. En cambio, en los entrenamientos, se ve que cada uno intenta darlo todo para ponerle las cosas difíciles al míster, pero repito, creo que es una competencia sana que va a venir muy bien al equipo para rendir más».
Precisamente, señaló que este buen feeling del vestuario se empieza a notar también con la afición. «Por la experiencia de otros años sé que la afición responde según vaya su equipo. Esta campaña, sin embargo, he notado cierto runrún por la calle, y que la gente que viene al fútbol se va de aquí contenta. Otras temporadas, a veces, a pesar de ganar el partido, el público no se iba satisfecho del todo. En este curso sí se van felices y no se escuchan murmullos, sólo palabras de ánimo y apoyo, algo que siempre sentimos y agradecemos los que estamos en el campo», concluyó.
