Los de Faisal Salmi llegaron a contar con ventajas de hasta cinco goles, cayendo en los últimos segundos. El Balonmano Virgen de la Victoria Melilla cayó derrotado ayer frente al Colomer Dental Algeciras por un ajustadísimo 24-23, en un partido de auténtico infarto que se resolvió en los últimos segundos y con polémica incluida. Al final, y pese a contar los de Faisal Salmi con cuatro goles de ventaja a cinco minutos de la conclusión (19-23), los algecireños se alzaron con la victoria, segunda de la temporada y novena consecutiva que encadenan.
El duelo había comenzado muy bien para los visitantes, que llegaron a disponer en varias fases de una renta de cinco tantos (2-7 y 4-9), aunque al intermedio se llegaría con un 10-13 favorable a los intereses de nuestro representante.
La segunda parte fue un quiero y no puedo para el Comercio Dental Algeciras, que luchaba por acercarse en el marcador, mientras los melillenses seguían a lo suyo, llevando la iniciativa en el luminoso y controlando el choque en todo momento. Esta tónica se mantuvo hasta la recta final de la contienda, en la que los algecireños con mucho corazón y empuje, y arropados por una afición que presionó hasta el final, los locales lograron empatar el encuentro.
Además, el Colomer Dental Algeciras gozaba de la última posesión, a falta de pocos segundos para la conclusión, siendo aprovechada por Juanma Cruz para establecer el definitivo 24-23.
Faisal Salmi, muy enfadado
El técnico del Balonmano Virgen de la Victoria Melilla no se mostró nada conforme con la actuación arbitral, quedando reflejado su malestar en los dos siguientes tweets que escribió en su cuenta de twitter: “El martes, con el video en la mano, denunciaré tanto federativamente como públicamente lo vivido en los minutos finales y el regalo del señor colegiado, con roja y posesión a falta de 30”, y con empate en el luminoso. Nos dejamos la vida para ganar y terminamos llorando por los suelos”, concluía el primero.
En el segundo, su enfado fue más allá al asegurar que tiene “ganas de dejar esto” y de dedicarse “a otras cosas, porque todo el trabajo y el sufrimiento de toda una semana se va al traste con una decisión que se inventa el árbitro y que el propio jugador nos ha reconocido que fingió. ¿Y qué medidas se toman para los árbitros?, se preguntaba Faisal Salmi.
