La secretaria general de Podemos Melilla, Gema Aguilar, exige a la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, que dé respuestas sobre el futuro de la aduana comercial de Beni Enzar, que permanece cerrada desde el 1 de agosto. "Queremos saber si, como muchos tememos, la intención de Marruecos es no volver a reabrirla jamás", señala. A su parecer, no se puede justificar el silencio que el Ejecutivo central está manteniendo sobre este asunto y que afecta directamente a la economía de nuestra ciudad. "Se supone que se iba a crear un grupo de trabajo con responsables marroquíes para abordar esta cuestión", rememora Aguilar, quien pide saber si ya se ha conformado esa mesa de trabajo y qué ruta pretende seguir para lograr la reapertura de la aduana comercial.
"Es que no tenemos noticias de si se ha creado o no, que es lo mínimo que nos podrían aclarar porque da la sensación de que se ha dado el tema por zanjado y de que ya se ha dado por perdido", manifiesta. Al respecto, Aguilar señala que, según una noticia publicada en El Confidencial, el grupo que anunció el ministro de Exteriores, Josep Borrell, sigue sin existir.
"El paso del tiempo, la ausencia de explicaciones y las pérdidas que afectan a nuestra ciudad son causas más que suficientes para que Moh nos aclare de una vez cuál será el futuro de la aduana comercial", dijo.
Admitir el cierre definitivo
La dirigente local de Podemos Melilla considera que es lícito que Marruecos quiera impulsar el puerto de Nador, pero entiende que el país vecino no puede tomar decisiones de forma unilateral que perjudiquen a España. "Lo mínimo que hay que hacer, sin abandonar la vía diplomática, es exigir que se respeten los acuerdos de buena vecindad que comprometen a ambos países y que implican que decisiones de este tipo sean abordadas de forma conjunta", resalta Aguilar.
Por este mismo motivo, Podemos pide a la delegada que, de saber con certeza que el cierre es definitivo, lo admita abiertamente. "Es mejor reconocerlo, aunque suponga un fracaso del Gobierno de Pedro Sánchez, a prolongar más en el tiempo una incertidumbre que no beneficia en nada a los empresarios ni a la economía de la ciudad", hace hincapié Aguilar. De esta manera, insiste, podrían empezar a explorarse otras alternativas que ayuden a paliar las pérdidas del cierre.
"No debe confundirse la discreción ni la cautela con la intención de ganar tiempo para evitar el chaparrón o las consecuencias que pueda traer la falta de avances en este asunto, que es de gran importancia para Melilla", reitera la dirigente del partido morado.
