El 28 de agosto de 2016, una quedada de amigos desembocó en una situación surrealista que bien pudo acabar en desgracia. La acusada, una joven melillense bajo los efectos del alcohol, cogió sin permiso el coche de una amiga y se fue a dar una vuelta a gran velocidad por el Paseo Marítimo, colisionando levemente con dos vehículos y dándose a la fuga en dirección al Hipódromo, donde perdió el control y chocó contra un coche estacionado, rebotando y colisionando -finalmente- con un todoterreno que se encontraba circulando. La joven, que no compareció en el juicio, carecía de permiso de conducir. El Ministerio Fiscal pidió para ella 2 años de prisión y el pago de los daños ocasionados al coche de su supuesta amiga. El 28 de agosto de 2016, sobre las 21h, 4 jóvenes -dos mujeres y dos hombres, entre los que estaba la acusada- fueron en coche hasta el Dique Sur para darse un baño. Los jóvenes habían estado bebiendo aquella tarde, y se turnaron -por parejas- para bajar al agua por las rocas del dique.
Cuando la propietaria del vehículo volvió de bañarse, se sorprendió al ver que su coche había desaparecido. La chica había dejado las llaves en el interior del coche, y su amiga -la acusada- , a quien conocía de apenas dos meses atrás, había decidido ir a dar una vuelta sin su permiso, por lo que la chica decidió llamar a la Policía.
Mientras tanto, la acusada, que se encontraba bajo los efectos de las bebidas alcohólicas y carecía de permiso de conducir, comenzó a circular a gran velocidad por el Paseo Marítimo. Antes de llegar al antiguo cuartel de Caballería, la acusada realizó un peligroso adelantamiento, impactando en los laterales tanto del vehículo al que adelantaba con del que venía de frente, arrancando el retrovisor del vehículo adelantado.
El conductor de dicho coche, acompañado de su mujer, siguió e hizo señales a la joven para que parara, aunque ésta hizo caso omiso y trató de huir a gran velocidad, si bien el tráfico acabó por impedírselo. No contenta con haber provocado el golpe, respondió a los requerimientos de los afectados haciéndoles un corte de manga y volviendo a huir, esta vez por la calle del autoservicio Lara, girando hacia el Hipódromo. Al llegar a la calle del Colegio Hipódromo, la acusada perdió el control del vehículo, se estampó contra un coche aparcado (siniestro total) y rebotó, impactando finalmente con un todoterreno que se encontraba circulando por la zona, causándole considerables daños.
La chica, una vez estrellada, trató de eludir la responsabilidad echando al copiloto del vehículo y sentándose en su asiento, si bien todos los afectados corroboraron “sin género de dudas” que era ella la que conducía. La joven dio positivo en alcoholemia.
Los daños causados al vehículo propiedad de la supuesta amiga de la acusada, que fue directamente al desguace, fueron valorados de 2.196 euros, por los que la joven reclama; “nunca le dejé el coche, al principio ella me dijo que me iba a ayudar con el arreglo, pero desapareció y no me ha pedido ni perdón”, declaró la propietaria.
El Ministerio Público pidió para la acusada, que ni siquiera compareció en la vista, una pena de 2 años de prisión, además del pago de los 2.196 euros correspondientes al arreglo del coche.
